Mauricio Pozo ratificó que el presupuesto que regirá en el 2021 tendrá una reducción de $ 3.000 millones, lo cual es una baja no marginal del 10% con respecto al del 2020. Esto, con base en una disposición del Código de Planificación de las Finanzas Públicas, que permite que el presupuesto para el 2021 sea el codificado (ejecutado) y no el inicial (original).
Explicó que la reducción será posible por la aplicación de varias estrategias. En primera instancia, se ha dispuesto a las diversas entidades del Estado normas que buscan bajar el gasto en bienes y servicios ($ 300 millones). También se prevé una reducción de $ 400 millones en la nómina, que se concretará con una revisión integral y con la no renovación de las vacantes ni tampoco de los contratos ocasionales. También se cuenta con el no pago de intereses de deuda, por unos $ 1.000 millones. Por otro lado, habrá ahorros por $ 300 millones de inversión que no eran imprescindibles.
Entre tanto, dijo que se enviará en enero a la Asamblea las reformas al Código Monetario y Financiero para que sea aprobado. La idea es que en esta nueva normativa se establezca una reestructura que le dé mayor independencia el Banco Central. En cuanto a los ingresos tributarios que se estiman para el presupuesto, dijo que en el 2021 llegarían a $ 13.100 millones, un poco más alto que los $ 12.500 millones que se lograrán en 2020.
Nota Original: El Universo – LINK