Uruguay intentó mantener la pelota, achicándole espacios a los paraguayos que no lograban ordenarse en la cancha del mítico Centenario, húmeda y resbalosa tras prácticamente dos días de lluvia ininterrumpida. Y lograron su cometido.
La apertura para los locales vino precisamente por parte del ‘matador’ Edinson Cavani, quien le pegó cruzado tras un pase de Suárez.
Las variantes introducidas por Tabárez, con Gastón Ramírez y Cristian Rodríguez ingresando desde el vestuario, le dieron a Uruguay una gran dinámica de juego.
El primer tiro franco de Paraguay llegó a los 31’ cuando el volante Egidio Arévalo Ríos perdió un balón y facilitó el avance del equipo ‘guaraní’, pero Néstor Ortigoza desperdició su chance disparando al arco sin habilitar a sus compañeros que venían a colaborar en el ataque.
A los 38’ fue el turno de Víctor Ayala que disparó bajo, fuerte, pero a las manos de Muslera. En la respuesta uruguaya llegó una falta al borde del área contra Suárez, que ejecutó Ramírez, pero la pelota se fue lejos y sin peligro por encima del horizontal del arco defendido por Diego Barreto.
La titularidad le sentaba bien a Rodríguez y a Ramírez, y vino el segundo de Uruguay, a los 42’ del primer tiempo cuando precisamente el ‘Cebolla’ Rodríguez cabeceó muy marcado un córner ejecutado por el 10 ‘celeste’, y la incrustó en la red.
Pero había tiempo para más y a un minuto del final Suárez desbordó por la izquierda, se metió entre la defensa paraguaya, eludió, gambeteó, y cuando retrocedía, un jugador rival resbaló y le dio al pie de apoyo del artillero del Barça que cayó en el área. Fue penal para Uruguay que ejecutó el propio Suárez, contundente a la izquierda del meta paraguayo, para sellar el encuentro.
Ya en el segundo tiempo, otra de Suárez terminó de signar el destino de Paraguay en este partido. Suárez atravesó toda la defensa, llegó hasta el límite de la cancha y pudo centrar a la cabeza de Cavani quien anotó el cuarto de Uruguay.