En los últimos tres años se ha ido pronunciando la baja: mientras en 2014 se vendieron aproximadamente 120 mil unidades, para el 2015 la cifra fue de 80 mil; y para 2016 se llegaría a 50 mil. Si se comparan los primeros cinco meses del año, se ve una baja de 41,13% al pasar de 40 mil 902 vehículos vendidos en 2015 a 24 mil 018, en 2016.
Esta caída también representa un impacto para la industria de autopartes, por el encadenamiento productivo, dice. La baja demanda ha hecho que las empresas hagan ajustes en el tema empleo. Algunas están trabajando con el stock existente, otras han tenido que parar las plantas y, por ello, muchas empresas de autopartes trabajan a medio tiempo.