El estado de Bolívar, el más grande de Venezuela –ubicado al sur del país– y donde abunda la minería ilegal de oro, es donde se registra la mayor parte de casos de esta enfermad, ahora endémica.
La organización Médicos sin Fronteras (MSF), que mantiene una misión desde el 2016 para ofrecer apoyo al Programa Nacional de Malaria, en colaboración con el Ministerio de Salud de Venezuela, refiere que en 2019 trató 85 000 casos en ese estado venezolano.
“En Bolívar también ayudamos con lo que llamamos control de vectores: fumigamos casas y distribuimos mosquiteros para disminuir el riesgo de infección”, explica Josué Nonato, promotor de salud de MSF.
El estado de Bolívar se ha convertido en el hogar de muchos venezolanos que, afectados por la crisis política y económica del país, se trasladan para trabajar en la minería de oro, que es vista como una última oportunidad para ganarse la vida antes de regresar a sus ciudades de origen o huir al país vecino, Brasil.
La crisis económica que golpea a Venezuela también afecta al Estado, que enfrenta una escasez de medicamentos e insumos para atender la malaria.
Fuente: El Universo, nota original aquí: LINK