Un paciente ha sido transferido a Alemania, indicó el Gobierno federal, y seis pacientes belgas han podido regresar a sus casas y reunirse con sus familias.
Un total de 41 personas se encuentran aún en cuidados intensivos, y en los centros especializados para quemaduras hay todavía 28 pacientes, indicó De Block en un comunicado.
«Los profesionales aplican la mejor atención médica posible para ayudar a esos pacientes a recuperarse cuanto antes, pero teniendo en cuenta la gravedad de las heridas su recuperación puede aún tardar», señaló la ministra.
El Gobierno explicó además que, tras un atentado, la mayoría de las víctimas tienen que hacer frente durante algunos días o incluso semanas a síntomas de estrés, una reacción normal a situaciones anormales, recalcó, por lo que Bruselas ofrece a estas personas la ayuda de expertos para un eventual seguimiento psicológico y social.
En el doble atentado, reclamado por el grupo yihadista Estado Islámico, fallecieron 32 personas y resultaron heridas más de 300.
