«Corresponde a todos los venezolanos y creo que a la Fuerza Armada en su conjunto, especialmente en esa juventud que nunca ha defraudado al país, está la clara consciencia de la necesidad de que esto debe detenerse, de que esto debe parar (…) el atropello hacia al país, al pueblo, a la Constitución «, dijo Alcalá en entrevista telefónica a la emisora privada RCR.
Alcalá, conocido por ser uno de los jefes militares más cercanos al fallecido presidente Hugo Chávez (1999-2013) y que pasó a retiró poco después de la muerte del líder socialista, consideró que Maduro «se ha ido deslegitimando profundamente y ha caído en el abuso de poder».
«Es un requerimiento de todos los venezolanos evitar esta degradación de nuestro país donde ya más de cuatro, cinco millones de venezolanos han tenido que partir al exterior (…) creo que es necesario indudablemente de avanzar en exigir, de cualquier forma, dentro del proceso de la Constitución», agregó.
Asimismo, rechazó la detención de Miguel Rodríguez Torres, exministro de Interior de Maduro, de quien dijo se encuentra incomunicado.
Además aseguró tener conocimiento de «torturas» a tenientes coroneles «que hasta ahorita fueron comandantes de unidades tácticas para poder sacar información infundada producto de una ruptura e involucrar episodios de conspiración para poder arremeter contra otros ciudadanos que disienten de este Gobierno, sea civil o sea militar».
Indicó que «sin lugar a dudas estos días que corren son importantísimos o para que la destrucción del país sea total o para la reconstrucción» del mismo.
Alcalá, hermano del alcalde chavista Carlos Alcalá, estuvo al frente de la unidad de defensa de Guayana -una zona estrategia militar que incluye los estados Delta Amacuro, Bolívar y Amazonas-, el área minera más importantes del país, designado por Chávez durante su último año de Gobierno, y fue removido poco después de su muerte.
Fuente: El Telégrafo