Ramaphosa habló con los medios de comunicación en momentos en los que la cumbre de los BRICS llegaba a su fin. Las naciones miembros del grupo, China, Rusia, India, Brasil y Sudáfrica, aprovecharon la reunión para hablar contra la guerra comercial del gobierno del presidente Donald Trump.
El mandatario turco Recep Tayyip Erdogan y varios jefes de Estado también asistieron a la cumbre como invitados.
Ramaphosa, quien se hizo cargo de la decaída economía de Sudáfrica luego de que Jacob Zuma dimitió en febrero, dijo que él y Erdogan no discutieron ninguna deportación de los ciudadanos turcos sospechosos de haber apoyado el intento de golpe de Estado de 2016.
Turquía tiene como objetivo a los seguidores del clérigo Fethullah Gule, quien reside en Estados Unidos y que niega haber orquestado el intento de golpe.
Fuente: El Universo