Los triatletas ecuatorianos Armando Matute y Elizabeth Bravo, así como el técnico Francisco Tirado, aún siguen en Mooloolaba, Australia. Ellos no pueden retornar al país debido al cierre de los aeropuertos en diferentes países por la propagación del covid-19.
En Mooloolaba, la noche del pasado 13 de marzo, Bravo terminó quinta en la primera válida de la Copa Mundo de Triatlón y logró el pasaporte para los Juegos Olímpicos en Tokio, Japón.
Matute, al día siguiente, se ubicó en el puesto 34. Tirado, entrenador y esposo de Bravo, contó al diario El Comercio que “seguimos en Australia y estamos aquí medio fregados porque los países cerraron sus fronteras”.
La planificación inicial era permanecer en Mooloolaba hasta el 19 de marzo y de allí viajar a Nueva Zelanda, sede de la segunda válida de la Copa Mundo que debía realzarse el 29 de marzo.
Sin embargo, esa competencia fue cancelada por el avance de manera acelerada del coronavirus a escala mundial. Por ese motivo se hicieron las gestiones para retornar de inmediato al país desde Mooloolaba, pero el cierre de algunos aeropuertos trastocó los planes.
El regreso era Estados Unidos. Tirado dijo que están sin dinero porque no reciben los recursos ofrecidos por la Secretaría del Deporte.
Los tres están alojados en una vivienda y por día pagan USD 115. “El alojamiento no es tan caro sino la alimentación”. En su muro de Facebook, Bravo contó que la Unión Internacional de Triatlón ha suspendido todas las competencias hasta finales de abril, por el rápido esparcimiento del covid-19.
“No podremos seguir con las competencias planificadas, pero lo importante es que podemos seguir entrenando sin perder el enfoque, tomando todas las medidas necesarias y recomendaciones de los expertos”.
Fuente: El Comercio-Nota Original: LINK