Que “Brasil no puede parar”, que el brasileño “no se contagia” de coronavirus porque “bucea en alcantarillas y no le pasa nada”. Y por último, que muera a quien le toque, porque así es la vida.
Mientras Latinoamérica se detiene, Jair Bolsonaro lleva adelante una campaña contra el aislamiento. Su irresponsabilidad es solo comparada con la de Manuel López Obrador en México que invitó a sus ciudadanos a seguir en las calles: «yo les aviso cuando tengan que quedarse en casa».
En contraposición a las recomendaciones de la OMS, el presidente de Brasil volvió a mostrarse escéptico en decretar la cuarentena obligatoria en el país, donde han muerto 92 personas y existen 3 417 infectados.
“En Río de Janeiro, hasta los datos de ayer (jueves) había nueve muertos, y 58 en Sao Paulo. Sé que hay una diferencia de población, pero es una cifra muy grande para Sao Paulo. No puede haber un juego de números para favorecer intereses políticos. No me creo esos números de Sao Paulo, sobre todo por las medidas que él (el gobernador Joao Doria) tomó”, declaró Bolsonaro en una entrevista telefónica en el canal Band TV.
El mandatario ultraderechista lleva semanas minimizando la gravedad de la pandemia, que tilda de “gripecita”, y emprendió una campaña contra las medidas de confinamiento decretadas en muchos estados, entre ellos Sao Paulo. Además, Bolsonaro comparó la pandemia del nuevo coronavirus con las muertes por accidentes de tránsito.
“¿Van a morir algunos? Van a morir, lo siento. Esta es la vida, esta es la realidad. No podemos detener la fábrica de automóviles porque hay 60 000 muertes de tráfico al año, ¿verdad?”.
Según Bolsonaro, las cuarentenas pueden provocar un “caos” social con “saqueos de supermercados” y representan una amenaza para la “normalidad democrática”.
Fuente: El Universo-Nota Original: LINK