Esas defunciones se las puede atribuir al COVID-19 o complicaciones relacionadas con esa enfermedad, sostuvo Agustín Albán, presidente del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) de Pichincha.
En una comparecencia en la Asamblea Nacional, el ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, dio cifras de los excesos de mortalidad en comparación con los dos años pasados.
En marzo, cuando se declaró la emergencia sanitaria en Ecuador, en Pichincha hubo 4,4 % más fallecidos; en abril, 21 %; en mayo, el porcentaje subió a 30 % y en junio, 40 %.
Francisco Pérez, de la Secretaría de Salud del Municipio de Quito, ayer en la sesión del Concejo afirmó que al 31 de julio se han levantado 167 cadáveres en domicilios, en ancianatos o en calles. En junio, 85. En mayo, 59. En abril, 33. En marzo, 3.
Albán mencionó que hay una lista de espera para usar camas en el sistema de salud público, el cual se encuentra bajo mucha presión desde hace diez semanas, cuando se llegó al tope de la capacidad.
Agregó que hay una etapa activa de contagios, mientras que para Zevallos, la capital no es el epicentro de la pandemia en el país. “Eso es errado. El que haya más contagios es porque la onda de expansión de cualquier enfermedad infecciosa, de cualquier pandemia, que empezó sobre todo en Guayaquil y que se fue expandiendo progresivamente a las provincias aledañas y que ahora ha llegado a Quito, no creo que es el epicentro, el epicentro es una palabra un poco dramática”, dijo. Prefirió decir que hay un aumento sostenido de casos que –acotó– ha permitido que haya atención médica.
Desde las últimas tres semanas, la cantidad de contagios se ha mantenido relativamente estable, aunque hubo un repunte de casos y de necesidad de camas sin que se haya producido un pico, como lo que pasó en Guayaquil, explicó Zevallos.
“Hay más casos en Quito (…). En los últimos diez días yo diría, a pesar de que ha habido un aumento muy grande de la necesidad de las pruebas de PCR, el porcentaje que salen positivos va bajando”, dijo Zevallos. Anunció que llegó al Ecuador el medicamento Remdesivir, que acortaría la estancia hospitalaria de afectados por la pandemia.
Nota Original: El Universo – LINK