Esta situación, de acuerdo con Henry Llanes, representante de la Asociación de Afiliados, Jubilados y Pensionistas de Pichincha del IESS, se debe a distintos factores, unos generados a raíz de la pandemia COVID-19.
Explica que los fallecimientos de personas jubiladas, unas por el virus y otras no, la pérdida de empleo y la demora en trámites son los motivos principales de la disminución de pensionistas.
«El Seguro Social tiene una crisis institucional y una fuerte crisis financiera. No tiene un presupuesto estructurado sobre la población de jubilados, no tiene balances consolidados, estados financieros actualizados y auditados. Otra de las razones son los trámites en aprobar que ha retrasado la jubilación», menciona.
De acuerdo con Llanes, la falta de agilidad en los procesos de jubilación se agudizó con la pandemia y afirma que es un tema preocupante.
Como también las pérdidas humanas, asegura Manuel Muñoz, presidente de la Confederación Nacional de Jubilados y Pensionistas de Montepío del Ecuador.
Nota Original: El Universo – LINK