Aclararon que «la aparición de una nueva variante no significa necesariamente un empeoramiento de la situación, pero sí significa que debemos aumentar las precauciones«. La OMS también ha resaltado la importancia de una estrategia a largo plazo que considere el tiempo de protección que brinda la vacuna, su impacto en los diferentes grupos etarios y el comportamiento de las nuevas variantes.
El 1 de diciembre, el Ministerio de Salud Pública (MSP) de Ecuador, inició la aplicación de la tercera vacuna contra el Covid-19, a personas que hayan cumplido 6 meses desde la última dosis recibida.
Aunque los científicos no aseguran que la variante Ómicron sea más transmisible que otras variantes, o si causa una enfermedad más grave, recomiendan a los Gobiernos que mantengan y refuercen las medidas de bioseguridad, así como sus esfuerzos de vigilancia.