En el último reporte ofrecido por el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, el canciller Juan Carlos Holguín detalló que entre los 11 heridos ecuatorianos hay cuatro en cuidados intensivos, cuyo estado es «crítico».
Respecto al resto de heridos, Holguín explicó que hay seis que están próximos a recibir el alta, entre ellos tres jóvenes y tres menores.
El titular de la cartera de Relaciones Exteriores ratificó que el número de ecuatorianos que viajaban en el autobús siniestrado era de 22 de un total de 66 migrantes.
Sobre este punto, destacó la dificultad que han tenido en determinar la cifra exacta ya que tanto venezolanos como haitianos se declararon como ecuatorianos al subir al transporte.
Además de los 22 ecuatorianos, también había 16 personas de Haití, 11 de Venezuela, 6 de Brasil, 5 de Colombia, 2 de Camerún, 2 de Cuba, una de Nigeria y una de Eritrea», según las autoridades de Panamá que han destacado que había veinte menores de edad, de ellos 12 niños y 8 niñas.
El siniestro ocurrió el miércoles alrededor de las 4.00 hora local (9.00 GMT) en Gualaca, un área de la provincia occidental de Chiriquí, situada a unos 450 kilómetros de la capital panameña, cerca de la frontera con Costa Rica.
Pendientes de identificación de cadáveres
Sobre la reserva para ofrecer el número de fallecidos, Holguín explicó que la Cancillería panameña ha pedido que no se entregue esa información hasta que no estén identificados plenamente todos los cuerpos.
No obstante, el ministro señaló que se trabaja tanto en el retorno de los heridos como en la repatriación de cadáveres hacia Ecuador.
«El accidente tuvo tal impacto que hubo decenas de cuerpos desmembrados que no pueden ser reconocidos (a simple vista). Se necesita un procedimiento judicial través de la Fiscalía para determinar con contundencia la identidad de los cuerpos», comentó Holguín.
Seis de una misma familia
Sin embargo, el canciller señaló que los 22 ecuatorianos procedían de las provincias de Pichincha (15), cuya capital es Quito, Imbabura (3), Loja (2), Tungurahua (1) y El Oro (1).
Los quince de Pichincha salieron del sur de Quito, entre ellos seis de un mismo núcleo familiar.
«Esto le hace cuestionarse a uno que no se ha hecho en año y medio o en dos años para que ellos tengan que salir. Está claro que en ese tiempo no se resuelven los problemas estructurales, pero hay que trabajar con más firmeza en las oportunidades y la esperanza», admitió Holguín.
Arremetida de mafias
Respecto a la oleada de migrantes irregulares de Ecuador que llegaron a la frontera de Estados Unidos en los últimos tres meses de 2022, el canciller explicó que se debió a «una importante arremetida» de las mafias con el anzuelo de la terminación del Título 42.
«Hicieron una arremetida importante para llevar como negocio muchos migrantes hacia Estados Unidos mencionándoles que iban a poder entrar en diciembre», señaló Holguín.
«Esos fueron los flujos que vimos e octubre, noviembre y diciembre cruzando el Darién y tomando la ruta aérea por Nicaragua», añadió el canciller, si bien matizó que los números han disminuido en enero y en febrero.
Fuente: El Comercio – Nota original: LINK