Durante la reunión Abbas pidió «el cese inmediato de esta guerra destructiva y el rápido suministro de ayuda humanitaria, incluidos suministros médicos, alimentos, agua, electricidad y combustible a la Franja de Gaza», según la agencia de noticias palestina WAFA.
«Nos reunimos una vez más en circunstancias extremadamente difíciles, y no hay palabras para describir el genocidio y la destrucción que nuestro pueblo palestino en Gaza está soportando a manos de la maquinaria de guerra israelí, sin tener en cuenta el derecho internacional», dijo Abbas a Blinken, según WAFA.
Ambos se habían reunido dos veces en Jordania durante el viaje de Blinken a la región hace varias semanas, después del 7 de octubre.
Según el relato de WAFA sobre la reunión, Abbas «cuestionó cómo se puede permanecer en silencio ante la matanza de diez mil palestinos, entre ellos cuatro mil niños, y decenas de miles de heridos, junto con la destrucción de infraestructura, hospitales, refugios y depósitos de agua». También advirtió contra el desplazamiento de palestinos de Gaza, la Ribera Occidental o Jerusalén, y rechazó enérgicamente tales acciones.
Abbas dijo a Blinken que la escalada de violencia de los colonos en la Ribera Occidental y Jerusalén no era «menos atroz, con asesinatos y asaltos a tierras, personas y lugares sagrados por parte de las fuerzas de ocupación israelíes y los colonos extremistas, que están cometiendo crímenes de limpieza étnica, discriminación racial y malversación de fondos del pueblo palestino».
Al menos 150 palestinos han muerto en la Ribera Occidental desde el 7 de octubre, según el Ministerio de Salud palestino, una cifra cercana al total de palestinos muertos en la Ribera Occidental en todo 2022.
Abbas dijo que Israel era «plenamente responsable de lo que está sucediendo», y agregó que «las soluciones militares y de seguridad no traerán seguridad a Israel». «Que dejen de cometer estos crímenes inmediatamente», pidió el presidente del Gobierno Autónomo Palestino al secretario de Estado estadounidense.
Según WAFA, Abbas hizo hincapié en que la seguridad y la paz «se puede lograr poniendo fin a la ocupación israelí del territorio palestino, con Jerusalén Este como su capital, sobre la base de las fronteras de 1967». También afirmó que «Gaza es parte integrante del Estado de Palestina, y asumirán plenas responsabilidades en el marco de una solución política global tanto para la Ribera Occidental, incluido Jerusalén Este, como para la Franja de Gaza».
Abbas negó la legitimidad de Hamas para representar al pueblo palestino, diciendo a Blinken que la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) es «el legítimo y único representante del pueblo palestino, con autoridad para tomar decisiones sobre todos los asuntos que conciernen al pueblo palestino».