En una noche que se pensaba sería de esparcimiento, el futbolista Diego Armando Lupu Carrillo, de 24 años, fue asesinado durante un ataque armado en las comunas ribereñas del cantón Santa Rosa, provincia de El Oro.
En medio de las festividades patronales de la localidad, Lupu, quien alguna vez soñó con grandes logros en el mundo del fútbol, salió de casa para pasar un momento ameno junto con un primo y otros amigos, sin imaginarse la tragedia que dejó un vacío irremediable en su familia.
El joven, que formaba parte de un equipo de segunda categoría y había competido en la liga provincial de El Oro, era conocido por su paso por las inferiores de Emelec, así como por haber jugado en Fuerza Amarilla, Santos FC y Deportivo Bolívar.
La madrugada de este domingo, 25 de agosto, su vida fue brutalmente arrebatada en un ataque que también cobró la vida de Adolfo Marino Macías Vera, de 56 años, y dejó herido a un primo del futbolista.
El hecho ocurrió en el sector Laguna de Caña, alrededor de las 03:00. Según los primeros informes, dos individuos llegaron al lugar donde se encontraban las víctimas.
Uno de ellos, sin mediar palabra, se acercó y disparó repetidamente contra el grupo, provocando la muerte inmediata de Lupu y Macías, mientras que Frixon L. sufrió una herida en el mentón.
Los moradores, alarmados por el sonido de los disparos, acudieron rápidamente para auxiliar a los heridos. Pese a los esfuerzos, la gravedad de las lesiones cobró la vida de Lupu y Macías. Frixon L. fue trasladado de urgencia al hospital local, donde permanece bajo atención médica.
La Policía Nacional inició las investigaciones sobre este ataque, que según fuentes preliminares, podría estar vinculado a la lucha de poder entre grupos de delincuencia organizada (GDO) que operan en el cantón.
Uno de los agentes mencionó que no se ha determinado si el ataque estaba dirigido específicamente a una de las víctimas o a todas, por lo que continúan con las indagaciones.
Fuente: El Universo – Nota original