El titular de la Secretaría Nacional del Agua (Senagua), Alexis Sánchez, confirmó que la contaminación persiste en el afluente, principal nicho de captación del agua cruda de la urbe más poblada de Ecuador, por lo que se mantendrá la suspensión de la captación del líquido hasta que se completen las tareas de remediación.
El funcionario indicó que luego de una inspección realizada la mañana de este miércoles se determinó que existen dos manchas superficiales del hidrocarburo (búnker), por lo que en coordinación con las autoridades seccionales y la empresa concesionaria de agua del Municipio de Guayaquil, Interagua, se dispuso la medida de los cortes temporales, a fin de precautelar la salud de más de 2,5 millones de personas que viven en esta ciudad costera.
Sánchez indicó que con el apoyo de la empresa pública Petroecuador se trabaja desde el preciso momento en que se reportó la emergencia en las tareas de remediación del río con técnicas de cercos e hidrosucción.
El funcionario, quien preside el Comité Nacional de Calidad del Agua integrado además por las carteras de Salud y de Ambiente, indicó que se trabaja en campo con técnicos especialistas en las tareas de mitigación, remediación y prevención.
De su parte, el gobernador Julio Quiñónez, representante del Ejecutivo en la provincia, señaló que se coordinó con la Fiscalía el inicio de oficio de las acciones penales, que -según dijo- configuran un delito ambiental que en el Código Integral Penal establece penas privativas de libertad de 3 a 5 años para los responsables.
“Venimos coordinando con la Fiscalía Distrital, hemos proporcionado información y ellos (Ministerio Público) también cuentan con información, se va a iniciar de oficio las acciones penales pertinentes frente a los responsables de la contaminación. La fiscalía va a iniciar el proceso desde hoy mismo”, expresó el gobernador.
Empresa responsable
De acuerdo con los informes preliminares realizados por la Senagua y el Municipio local, la contaminación se produjo la tarde del martes último en la empresa de fabricación de productos de balsa Balsasud, cuyo presidente es Pascual del Cioppo, quien además es director nacional del Partido Social Cristiano.
El Municipio de Guayaquil clausuró la empresa Balsasud por el derrame de búnker al río Daule. Foto: César Muñoz/Andes
Desde allí, según un comunicado de la empresa responsable, se vertieron unos 50 galones de búnker al río, supuestamente por descuido de un operador. Esto provocó la inmediata clausura de parte de las autoridades municipales.
No obstante, luego de una inspección que realizó en la planta causante de la contaminación, el secretario del Agua indicó que el hidrocarburo jamás debió llegar hasta el lecho del afluente si la fábrica contaba con las medidas adecuadas para evitarlo.
Además, el gobernador señaló que como agravante está el hecho de que fue la población la que alertó de la contaminación a la Policía y de allí se coordinaron las acciones pertinentes, a través del Sistema Integrado de Seguridad ECU-911, y no fue la empresa Balsasud la que dio aviso de la emergencia como correspondía.
“Fue la población la que alertó del derrame y no la empresa y eso proporciona más agravantes ante este hecho”, cuestionó Quiñónez.
El alcalde de Guayaquil, el socialcristiano Jaime Nebot, quien en un comunicado difundido la víspera pidió “cárcel inmediata” para los responsables informó que enviará a la Fiscalía la denuncia contra la empresa Balsasud por la contaminación en el río Daule.
“Si el presidente de Balsasud fuera mi mamá, sería lo mismo”, dijo, según recoge diario El telégrafo, el burgomaestre ante la inquietud de periodistas sobre si hay conflicto de intereses porque el presidente de la junta directiva de Balsasud es su coideario.
