Durante una visita de trabajo que realizó la semana pasada el canciller de Ecuador, Guillaume Long, a Gran Bretaña,se reunió con el ministro de Asuntos Exteriores, Hugo Swire, con quien mantuvo “una conversación cortés, franca, pero dura”, sobre las relaciones entre ambas naciones, teniendo en cuenta las diferentes posturas en el caso Assange.

Cancillería

En este espacio, el ministro ecuatoriano propuso mantener una Agenda Bilateral Positiva para tratar temas de gran interés, como tecnología y conocimiento, educación, comercio, temas humanitarios y de cooperación internacional, entre otros. Sin embargo, reconoció que el británico responsable de las relaciones internacionales con América Latina, descartó esta posibilidad mientras el fundador de Wikileaks esté asilado en la Embajada de Ecuador. “Me pareció una respuesta más que hostil. Afortunadamente Ecuador no se deja hoy en día amedrentar o intimidar por ese tipo de hostigamiento y de irrespeto”, señaló.

El Canciller ecuatoriano explicó que este es un mecanismo diplomático para tratar temas de conveniencia de ambas naciones, separando situaciones de conflicto. Citó como ejemplo que el mismo país mantiene una Agenda Bilateral Positiva con Argentina pese a que viven un proceso de litigio internacional por las Islas Malvinas.

Desde Ecuador, “estamos demostrando, a través del caso Assange, y de muchos otros casos, que somos una nación soberana y que no nos vamos a dejar intimidar. Si no quieren agenda bilateral positiva, no la tendrán. Pero que conste que en esta relación, la parte que está buscando tener una relación más fluida, es el Ecuador”.

En este espacio también trasladó las preocupaciones que tiene el Ministerio de Relaciones Exteriores sobre la vigilancia extrema en los exteriores de la Embajada de Ecuador en Reino Unido. Esta medida, que la calificó como un “estado de sitio”, también conlleva a una difícil situación permanente para los funcionarios de la Embajada de Ecuador en Reino Unido, tanto como para el señor Julian Assange.