Según el mandatario, unas mil mujeres que viven en el municipio de Ureña, Táchira, llegaron a territorio colombiano en horas de la mañana y a pesar de que en principio la Guardia Nacional Bolivariana no quiso dejarlas atravesar la frontera, la presión de ellas hizo que les abrieran paso.
“Ellas lo que manifestaban era que allá no tienen alimentos para comprar, entonces se dirigieron a los diferentes supermercados y tiendas a comprar lo que necesitaban: papel higiénico, aceite, harina y otros productos de la canasta familiar”, dijo el alcalde a CNN en Español.
Medios locales dicen que fueron unas 500 mujeres en promedio.
El secretario de Gobierno de Cúcuta, Óscar Gerardino Astier, dijo a este medio que fueron al menos unas 600 mujeres.
Videos publicados en redes sociales muestran el momento en el que el grupo de mujeres rompe la barrera de la policía e ingresa pacíficamente al territorio colombiano.
La mayoría de ellas vestidas con camisetas blancas llegaron aplaudiendo a Colombia o entonando arengas; otras gritaban “sí se puede”.
“No tenemos alimentos en nuestras casas, nuestros hijos están pasando hambre. Hay mucha necesidad”, relató una mujer proveniente de Ureña, Táchira, según un video publicado por el diario colombiano La Opinión.
La canciller María Ángela Holguín llegó a Norte de Santander este miércoles para revisar la situación en la frontera. Holguín dijo a periodistas que Colombia no dejará que los venezolanos pasen hambre.
“Lo que nosotros creemos, y de eso estamos convencidos, es que no vamos a dejar que nuestros hermanos venezolanos pasen problemas de hambre y de necesidades de medicamentos… si hay que ampliar el corredor humanitario lo ampliaremos, jamás dejaremos a los venezolanos con necesidades de comida o de salud”, dijo la canciller según citan medios locales.
Regreso pacífico
El alcalde de Cúcuta aseguró que una vez este grupo de mujeres hizo las compras volvieron de manera pacífica a Venezuela, pidiendo que se reabra la frontera entre Colombia y Venezuela, que permanece cerrada desde el 20 de agosto de 2015 cuando el presidente Nicolás Maduro alegó problemas de inseguridad, paramilitarismo y contrabando en la zona.
A pesar del constante llamado que hacen los habitantes para que se reabra la frontera, el diálogo entre las autoridades no ha dado fruto hasta el momento.
El pasado 1 de julio los gobernadores de Norte de Santander, Colombia, William Villamizar Laguado, y de Táchira, José Vielma Mora, se reunieron en el puente internacional Simón Bolívar para tratar el tema de la reapertura, pero no lograron ningún avance concreto.
Un comunicado de la gobernación de Norte de Santander resaltó que “se avecinan excelentes noticias para la zona de frontera entre Colombia y Venezuela” luego de la reunión entre mandatarios locales y que tanto Villamizar Laguado como Vielma Mora eran “portadores de buenas noticias para los presidentes Juan Manuel Santos y Nicolás Maduro”, pero en esa comunicación no se habla de acciones concretas.
“Resalto con alegría que el Gobernador del Estado Táchira esté aquí; este es un hecho simbólico que refleja la necesidad de la reapertura de la frontera… Estamos muy contentos con su presencia y por esta integración. Ahora hay que trabajar en equipo para combatir el contrabando y la inseguridad, y fomentar la reactivación de las actividades comerciales”, dijo el gobernador Villamizar Laguado en el comunicado de prensa.
Entre tanto, la frontera entre los dos países sigue cerrada “hasta que se termine de restituir toda la vida social, económica y la seguridad” del país, dijo el presidente Maduro en enero de este año.