Felipe Ogaz, presidente de la Comisión Popular Promotora de la Ïniciativa Antitaurina, en entrevista vía telefónica para Notimundo a la Carta con Rodrigo Proaño, habló acerca de la polémica generada alrededor de la autorización para que se vuelvan a realizar corridas de toros en Quito por parte del Municipio. Este martes 22, Mauricio Rodas, alcalde de la capital, se negó a presentarse a la comparecencia convocada por el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, lo cual representa, según el vocero, “la ilegalidad” de una ordenanza que considera hipócrita, ya que les permitía hacer corridas de toros “sin matar” al animal, pero «sí torturarle, atormentarle, y finalmente quitarle la vida a escondidas».
Ogaz presentará una medida cautelar para prohibir estos eventos. El Burgomaestre no ha convocado a un segundo y definitivo debate de esta iniciativa, dice el activista. «Se niega a conversar como con la mayoría de quiteños, no es un Alcalde que rinda cuentas”.
El portavoz citó un artículo constitucional sobre el que asegura es la base bajo la cual su colectivo plantea sus acciones legales. “El incumplimiento de estas disposiciones relativas a la participación ciudadana por parte de las autoridades de los Gobiernos Autónomos Descentralizados, generará responsabilidades y sanciones de carácter político y administrativo, incluyendo la remoción del cargo para los funcionarios responsables de la omisión y podrá ser causal de revocatoria del mandato para la autoridad respectiva conforme a la ley”, entretanto afirma que “a eso se expone el alcalde Rodas por irrespetar la voluntad popular”.
La organización pretende prohibir no sólo las corridas de toros en las ciudades principales y en los pueblos del país, sino también las peleas de gallos y perros, los circos que usen animales en sus actos y toda clase de espectáculos que implique el maltrato de los mismos. Según encuestas realizadas por el grupo, el 70% de quiteños respalda sus propuestas.
Ogaz asegura que el alcalde capitalino en sus discursos durante la campaña política para ocupar el cargo que hoy en día preside, se comprometió a “eliminar estos espectáculos cumpliendo la voluntad popular”.
En pos de defender sus ideales y en protesta ante la negativa de la autoridad a mantener un diálogo con los antitaurinos, se han tomado la sede del partido Suma y el despacho del Burgomaestre. El líder de la iniciativa añade que “Habiendo una clara y flagrante ilegalidad por parte del Municipio de Quito, nosotros hemos convocado a un proceso de desobediencia civil”, el cual consiste también en un “boicot” a las marcas comerciales que auspician estos eventos.
“Si la autoridad no va, no se pone los pantalones, no toma una decisión, no puede decirles no a los poderes políticos corruptos de esta ciudad, pues el pueblo empieza a actuar y empieza un proceso de movilización».
Ogaz sustenta la ilegitimidad de la ordenanza basándose también en la Consulta Popular realizada en el año 2011, en la que el 54,43% de los quiteños votaron a favor de la prohibición de este tipo de actos.