Joan Proaño, gerente general de la constructora Proaño y Proaño, en entrevista en Notimundo al día con Ernesto Noboa, confirmó que en 2016 el sector de la construcción se contrajo en un 10%, el sector inmobiliario en un 15% y las ventas de proyectos en un 50%. Esto, según dijo, por las leyes aplicadas por parte del Gobierno Nacional, que desde 2015 hasta la actualidad ha ocasionado que los inversionistas del sector tomen decisiones como la paralización de obras lo que a su vez tiene un efecto negativo en el empleo de obreros, la compra de materiales, entre otros.
Proaño señaló que bajo estas condiciones y aún más, si no hay un cambio de timón en las elecciones de febrero, 2017 se proyecta sin nuevas inversiones sobre todo en viviendas de interés público para el extracto medio y alto. «Desde 2015 el sector inmobiliario ha tenido que enfrentarse a la aplicación de salvaguardias; a la Ley Orgánica para Evitar la Especulación sobre el Valor de las Tierras y Fijación de Tributo y a la Ley de Contribución especial de mejoras de obra pública», afirmó.
Asimismo, el empresario comentó que el incremento del IVA del 12% al 14%, amparado en la Ley Solidaria y de Corresponsabilidad Ciudadana por la afectación del terremoto, también afectó al sector de la construcción, quien debió asumir ese porcentaje y al final refleja una pérdida del 2% adicional.
«En marzo de 2015 se implementó una sobretasa de entre el 5% y el 45% a 2 800 subpartidas arancelarias de las cuales 400 ítems estaban directa e indirectamente relacionados con el sector inmobiliario, y para completar el 11 de enero se aprobó la Ley de Contribución especial de mejoras de obra pública la cual indica que los contribuyentes cuyo inmueble esté cerca de una obra pública como escuelas, hospitales y más deberán pagar un monto que no supere el 50% del beneficio generado por la obra», acotó.