El anuncio se produce un día después de que Corea del Norte disparó cuatro misiles balísticos al Mar de Japón, también conocido como el Mar del Este.
China ha expresado su oposición al sistema defensivo conocido como THAAD (Terminal High Altitude Area Defense), al que considera una amenaza para su propia seguridad.
Pero con Corea del Norte incrementando la cantidad de lanzamientos de misiles y ensayos nucleares, EE.UU. y Corea del Sur han subrayado públicamente la necesidad de acelerar el despliegue de la tecnología.
«Los actos de provocación continuada por parte de Corea del Norte, que incluyen el lanzamiento ayer de varios misiles, sólo confirman la prudencia de nuestra decisión de alianza el año pasado para desplegar THAAD en Corea del Sur», dijo el comandante Harry Harris, del Comando del Pacífico, en un comunicado.
El sistema está diseñado para derribar misiles que amenazan a la población civil.
La decisión de desplegar el sistema en Corea del Sur se tomó en julio del año pasado, y el gobierno del presidente estadounidense Donald Trump dijo que está decidido a seguir.
El secretario de Defensa, James Mattis y su homólogo surcoreano, Han Min-koo, hablaron por teléfono la semana pasada y coincidieron en que debe desplegarse el THAAD «lo antes posible».
Las objeciones chinas
China se ha opuesto desde hace tiempo al despliegue de un sistema de defensa tan cerca de sus fronteras. El lunes, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Geng Shuang, dijo que el despliegue «altera el equilibrio estratégico de la región».
«Nuestra posición sobre el tema THAAD es muy claro y no lo voy a repetir aquí. Quiero enfatizar que firmemente nos oponemos al despliegue de EE.UU.-Corea del Sur del sistema de defensa de misiles THAAD en Corea del Sur. Tomaremos medidas firmes para preservar nuestro propio interés en seguridad, y EE.UU. y Corea del Sur deberán soportar las potenciales consecuencias. Urgimos fuertemente a las partes relevantes a detener el despliegue y evitar el camino incorrecto», dijo el portavoz del Ministerio de Exteriores, Geng Shuang, este martes.
El descontento de China, según los informes, se ha dejado sentir por las empresas de Corea del Sur, en particular por Lotte, el conglomerado surcoreano que firmó un acuerdo con el gobierno para proporcionar un sitio para el sistema de lanzamiento del THAAD.
En un comentario publicado por la agencia de noticias oficial de China, Xinhua, se lee que Lotte podría «dañar al pueblo chino» y las «consecuencias podrían ser graves» si seguía adelante.
«Lotte puede llegar a perder clientes chinos y el mercado chino», dice el artículo, que no estaba firmado.
Si Beijing elige tomar represalias a través del comercio, podría hacer una mella significativa, ya que China es el mayor socio comercial de Corea del Sur.
Casi la mitad de los 17 millones de personas que visitaron Corea del Sur el año pasado eran chinos, de acuerdo con datos de la Organización de Turismo de Corea.
Limitaciones
El sistema no es una panacea que protegería completamente a EE.UU. y sus aliados de la amenaza de los misiles de Corea del Norte.
Está «exclusivamente dirigido a la defensa de Corea del Sur contra los misiles de Corea del Norte», según las fuerzas estadounidenses en Corea.
El sistema podría quedar anulado si Corea del Norte lanzara una serie de misiles simultáneamente y no es eficaz contra los misiles balísticos lanzados desde submarinos desde el sur, este u oeste de Corea del Sur, de acuerdo con un informe del grupo de monitoreo 38 North .
El THAAD puede detectar y seguir blancos a una distancia de unos 1.000 kilómetros, según el informe, lo que significa que no puede detener un potencial misil balísticos intercontinental (ICBM).
El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, dijo en enero que su país está en las etapas finales de desarrollo de un misil balístico intercontinental, que podría llegar a la costa oeste de los Estados Unidos.
Pero el presidente Trump prometió que eso «no va a suceder» en un tuit antes de su toma de posesión.