Se ha cumplido la última fase del proceso electoral. Lamentablemente, indicó el Dr. Echeverría, los acontecimientos que le preceden han mermado la legitimidad institucional de las autoridades electorales y los poderes del Estado. “La legitimidad ha venido a menos justamente por las inconsistencias, que desde distintos ángulos y actores políticos, se han mostrado en el proceso electoral mismo” explicó.
El sistema del proceso está diseñado para garantizar la legalidad de los resultados e impulsar una agenda política preferida por la ciudadanía, dijo el Dr.Echeverría; pero “hay un conjunto de instituciones sometidas a la voluntad hiper-presidencialista” que impiden la plena confianza en los pronunciamientos oficiales.
Por tanto es menester “virar la página”, comentó el analista, y buscar consensos para las reformas que urgen al sistema político y económico
