Como exitosa y satisfactoria calificó el Gobierno la jornada de la polémica elección de la Asamblea Nacional Constituyente, marcada por la violencia, el caos y la represión que dejó 10 muertos, centenares de heridos y decenas de detenidos.
A las doce horas de elección, que registró escasa presencia de votantes, se prolongó una hora más, hasta las 19:00, hora de Venezuela. No obstante, alrededor de las 21:00 seguían abiertos los centros de votación. Se esperaba el anuncio de los primeros resultados, pero hasta cerca de las 23:00 no hubo ninguna declaración de la presidenta del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena.
El opositor Henry Ramos Allup, en una rueda de prensa, en la que responsabilizó al Gobierno de la violenta jornada, dijo que según con los datos de la oposición, en el proceso electoral participaron 2 millones 483 mil personas, con una abstención de 87,6%. Denunció que el Plan República no permitió que periodistas ingresaran a centros de votación.
“Esta jornada ha sido un fracaso, un monumental fracaso, lamentablemente, con la pérdida de vidas humanas”, dijo el líder opositor, Henrique Capriles. “No nos importa lo que diga Tibisay Lucena en las próximas horas”, agregó y llamó a salir hoy a las calles en una nueva lucha de no reconocimiento al proceso de Constituyente.
El país parecía zona de guerra en barrios de ciudades venezolanas. La jornada sumó 10 muertos, 16 según la oposición, lo que elevó a 124 las víctimas en 121 días de protestas.