Al menos 30 personas, incluyendo niños y 18 mujeres, murieron en una zona sitiada de la ciudad siria de Aleppo, en dos noches de bombardeos de las fuerzas rebeldes, dijo este martes el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con base en Londres.

CNN

Los grupos rebeldes anunciaron la noche del domingo que iban a lanzar una ofensiva en algunos barrios, en un esfuerzo para romper el asedio del ejército del régimen sirio en la parte oriental de la ciudad, en poder de los rebeldes desde julio de 2012.

La situación en el este de Aleppo se ha convertido rápidamente en una crisis humanitaria, donde escasean los alimentos básicos, agua, combustible y suministros médicos.

El gobierno dijo que hay tres corredores humanitarios abiertos, tanto para obtener suministros como para permitir la huida de los residentes.

Pero sólo 169 civiles huyeron durante el fin de semana, dijo el ejército ruso, una pequeña fracción de las entre 200.000 y las 300.000 personas atrapadas.

Fuentes de CNN sobre el terreno creen que los residentes tienen demasiado miedo a huir.

Un helicóptero ruso fue derribado el lunes sobre la provincia de Idlib, matando a las cinco personas a bordo. El Kremlin dijo que el equipo había entregado ayuda en Aleppo y el helicóptero fue derribado cuando regresaban a la base.