Según el informe de borrador de un examen especial realizado por Contraloría, tanto directores, como gerentes y subsecretarios de Eficiencia Energética no efectuaron seguimiento ni control de 12 transacciones realizadas, las cuales tampoco contarían con soporte.
Por otra parte, fueron detectados ajustes en las ventas de las cocinas de inducción en las casas comerciales, sin sustento técnico. Esto representa un monto aproximado de USD 1,4 millones que no cuentan con registro contable.
El organismo de control observó además que se otorgaron más de USD 74.000 en créditos a las comercializadoras que superaron los plazos de financiamiento y pago, estipulados en la normativa del Programa de Eficiencia Energética, de acuerdo al examen especial realizado entre 2012 y 2018.
Se determinó también que no hubo una contratación del personal requerido para la coordinación y ejecución del programa, que pretendía la sustitución de cocinas a gas por las de inducción. De una venta prevista de 3 millones de cocinas, apenas fueron comercializadas 771.911, de las cuales unas 565.000 fueron financiadas.
El equipo auditor determinó que el incumplimiento de las metas establecidas obedece a la falta de coordinación y promoción del programa, el cual fue reagendado hasta 2023. Las empresas comercializadoras de cocinas y ollas, así como de calentadores de agua, tenían 36 meses como plazo máximo de recaudación de los montos adeudados.
Sin embargo, la falta de supervisión derivó en una extensión del plazo, lo que prolongó el tiempo de recuperación del financiamiento. Otro aspecto que afectó el cobro de la cartera financiada por el Estado fue la descoordinación con las empresas eléctricas, que recaudaban el valor de los electrodomésticos a través de las planillas. También hubo inobservancia en la conformación de un Comité Técnico de Seguimiento.
Los equipos de auditoría continúan evaluando el volumen de la información presentada en este examen especial, por lo que la información de descargo será contemplada en el informe final. El anterior gobierno diseño el plan de eficiencia energética para sustituir el uso de cocinas a gas y aprovechar la infraestructura de generación eléctrica instalada, pero la iniciativa no tuvo la demanda esperada.
El ministro de Recursos Naturales no Renovables, Carlos Pérez, manifestó en septiembre de 2018 que el programa ya no será implementado. Indicó que el stock de cocinas embodegadas podría utilizarse en el plan Casa para Todos.
Fuente: El Telégrafo – Nota original: LINK