“Las primeras dos canciones ‘Head Above Water’ y ‘Warrior’ las escribí cuando estaba en cama, uno de los momentos más terroríficos de mi vida. La música está en mi alma y dije: ‘quiero seguir haciendo música, quiero escribir canciones para este álbum, pensar en la producción, en el estilo… realmente hacer esto me dio mucha fuerza, me hizo sentir mejor y fue muy bueno para mí tener ese objetivo”.
La cantante también dedica tiempo a su fundación The Avril Lavigne Foundation, que apoya a personas de bajos recursos para tratarse de distintas enfermedades.