Este viernes se instaló la audiencia preparatoria de juicio por peculado en el que hay nueve procesados. Se alegó que Glas ha intentado suicidarse.

Jorge Glas, exvicepresidente de la República. Foto: API

La defensa de Jorge Glas Espinel, exvicepresidente de la República en el gobierno de Rafael Correa y preso por hechos de corrupción, solicitó en la audiencia evaluatoria y preparatoria de juicio en el caso Reconstrucción de Manabí que se analice la aplicación de una medida de seguridad, contemplada en el Código Orgánico Integral Penal (COIP) para que sea trasladado a un hospital psiquiátrico por padecer un trastorno relacionado con intentos de suicidio.

La audiencia evaluatoria y preparatoria de juicio en el caso Reconstrucción de Manabí logró instalarse este 20 de diciembre de 2024, al décimo intento.

En este hecho se procesa a nueve personas, entre ellas, el exsegundo mandatario, Jorge Glas y los exministros Walter Solis y Carlos Bernal, y otras seis personas por peculado.

La diligencia se ha diferido por nueve ocasiones anteriores, y este viernes la instaló el juez nacional Marco Aguirre, quien reemplaza a Julio Inga, que enfrenta una recusación que está en trámite.

La diligencia inició con el conocimiento de los posibles vicios de nulidad que expresen los sospechosos. En su caso, la defensa técnica de Jorge Glas, que cumple una sentencia por cohecho en la cárcel La Roca, a cargo del abogado Andrés Villegas Pico, apuntó a tres vicios de nulidad.

Uno de ellos, la detención de Glas la noche del 5 de abril de este año, cuando se lo aprehendió en la embajada de México en Quito en donde se refugió por varios meses.

Según Villegas esa fue una detención ilegal porque se violaron convenios internacionales y, además, porque el parte de detención se elaboró con “contenido falso porque se consignó como lugar del evento, la Unidad de Flagrancia en la avenida Patria”.

Contó que ese día, Glas, al momento de firmar el parte policial no puso su firma, sino que escribió la frase: “fui torturado”.

“Fue la única forma de expresarse. Sin embargo, ese detalle de la Fiscalía no ha merecido el más mínimo comentario”, reclamó.

La defensa continuó con el relato de que hay informes psiquiátricos suscritos por médicos del Ministerio de Salud Pública que establecen que Jorge Glas se encuentra en una alta probabilidad de que atente en contra de su vida.

Y recordó el evento días después de su captura en la sede diplomática, cuando fue trasladado a la cárcel La Roca, en la que fue encontrado inconsciente en su celda.

Villegas increpó que después de la revisión médica, no lo llevaron a observación de un médico psiquiatra y evocó una medida dispuesta en el COIP respecto de esta condición.

“Si durante una instrucción fiscal, el investigado, presenta síntomas de algún tipo de trastorno, debe ser sujeto de la única medida de seguridad que prevé el COIP para los que sufren trastorno y que es el internamiento. Esa medida es ordenada por el juzgador. Es decir, no se puede mantener preso en una cárcel común y corriente, a quien no debería estarlo por un trastorno”, indicó Villegas.

En ese sentido, el abogado pidió al juez Aguirre que se pronuncie sobre este posible vicio de nulidad del caso y si “cabe o no cabe la aplicación de esta medida de seguridad”.

El artículo 76 del Código señala: “Internamiento en un hospital psiquiátrico.- El internamiento en un hospital psiquiátrico se aplica a la persona inimputable por trastorno mental. Su finalidad es lograr la superación de su perturbación y la inclusión social. Se impone por los juzgadores, previo informe psiquiátrico, psicológico y social, que acredite su necesidad y duración. Las medidas de seguridad estarán a cargo del ente rector de salud pública”.

Luego de escuchar las alegaciones de las partes acusadas, el titular de la Fiscalía General del Estado, el fiscal subrogante, Wilson Toainga solicitó un receso de dos horas para poder contradecir los pedidos de nulidad planteados por los procesados.

El magistrado otorgó este receso, por lo que la diligencia se retomaría en horas de la tarde.

Fuente: El Universo – Nota original