El gobernador Andy Beshear declara el estado de emergencia y alerta de que el número de fallecidos podría superar el centenar.

Créditos: El País - Michael B. Thomas (AFP)

Inmensos conos invertidos, negros y salpicados de rayos, con una furia desmedida, hasta 30 tornados fueron arrasando con todo lo que encontraban a su paso por los Estados de Kentucky, Illinois, Missouri, Arkansas, Mississippi y Tennessee. Hasta el momento, se han notificado 79 personas muertas durante la madrugada de este sábado. Aun así, el gobernador de este Estado, Andy Beshear, alertaba de que “el número total de muertos podría ser mayor de 100″. “Los informes son realmente desgarradores”, lamentaba Beshear. “Tengo problemas para poner en palabras la devastación que veo”, aseguraba el gobernador. El Estado de emergencia se declaró en la medianoche del viernes y se desplegaron equipos de rescate en las zonas más afectadas de Kentucky.

El presidente Joe Biden ha calificado los tornados que han azotado las regiones del sur y del centro de Estados Unidos como una “tragedia inimaginable”. “Quizá el más devastador de nuestra historia”. Desde su hogar de Wilmington (Delaware), el mandatario dijo a sus conciudadanos que el gobierno federal no iba a escatimar recursos para socorrer a los afectados por la larga serie de tornados. Biden dijo haber conversado con el Gobernador Beshear, quien le confesó que lo que había contemplado era similar a “una zona de guerra, o peor”. Para Biden, lo sucedido en la madrugada del sábado está íntimamente ligado al cambio climático. El calentamiento global provoca que los fenómenos meteorológicos sean cada vez “más intensos”, aseguró el demócrata.

“Perder a un ser querido en una tormenta como esta es una tragedia inimaginable. Estamos trabajando con los gobernadores para asegurar que tienen lo necesario para la búsqueda de sobrevivientes y la evaluación de daños”, tuiteó Biden. A pesar de que los vientos ya casi no tienen poder de rotación siguen avanzando y junto a ellos copiosas tormentas. La Casa Blanca ha declarado su deseo de visitar la zona afectada pero quiere encontrar el momento adecuado, para no entorpecer las labores de reconstrucción y búsqueda de personas.

Las autoridades de Arkansas, Illinois, Kentucky, Mississippi, Missouri y Tennessee siguen trabajando esta mañana de sábado para confirmar el número de víctimas mortales entre los escombros. La violencia desmedida de los tornados y las tormentas han dañado de forma irreparable una fábrica de velas en Mayfield, Kentucky; un hogar de ancianos en Monette, Arkansas; un almacén de distribución de Amazon en Edwardsville, Illinois, perdía una gran parte del techo, provocando el colapso de una de sus paredes; de cientos de hogares, iglesias y colegios en los seis Estados quedan estructuras huérfanas de tejados y muros. Miles de hogares están sin electricidad y es difícil hacer una predicción de cuándo retornará.

Uno de los tornados se desplazó a lo largo de más de 225 millas (unos 365 kilómetros) por Kentucky, el Estado más golpeado. El Servicio Nacional de Meteorología reconoce ya ese tornado como el más largo de la historia. Las imágenes que se comparten en redes sociales y en los canales de televisión norteamericanos mostraban techos de casas o naves industriales arrancados de cuajo al paso de los tornados. Para el gobernador de Kentucky, los daños como consecuencia del temporal serán “de los peores que hayamos visto en mucho tiempo”.

Las zonas más dañadas se encuentran en Mayfield, en el oeste de Kentucky, donde el tornado ha afectado a infraestructuras, negocios y residencias. Alrededor de 110 personas se encontraban en el interior de una fábrica de velas cuando el tornado arrasó el área, dejando a los trabajadores atrapados. “Creemos que perderemos al menos a docenas de estas personas”, ha señalado Beshear.

En Estado de Tennessee, al menos a tres personas han muerto a causa del temporal, según ha confirmado el portavoz de la Agencia de Emergencias del Estado, Dean Flener. Y en el norte de Arkansas, en Monette, al menos una persona ha muerto y cinco resultaron heridas cuando un tornado destrozó el techo de una residencia de mayores donde se encontraban.

Fuente: El País – Nota original: LINK