Cinco personas han muerto y tres han resultado gravemente heridas en el atentado de la calle Istiklal, según ha declarado el gobernador de Estambul, Vasip Sahin, a los medios turcos.

El ataque fue cometido por un suicida que detonó sus explosivos minutos antes de las 09.00 gmt en esta céntrica calle de Estambul, delante de la oficina de gobernación del distrito.

Tres personas, además del propio atacante, murieron en el lugar y otra más tras ingresar en el hospital, por lo que ya son cinco los fallecidos, señaló Sahin.

En total se han contabilizado 20 heridos, entre ellos tres graves, y continúa el tránsito de ambulancias por la calle Istiklal, que ha sido acordada por la policía.

Según los testimonios citados por CNNTürk, los explosivos que llevaba el terrorista detonaron mientras caminaba, lo cual podría indicar que todavía no había llegado al lugar previsto.

Aunque primero se especulaba con la posibilidad de que un cercano centro comercial fuera el blanco, ahora parece más probable que el atacante se dirigía al edificio de gobernación del distrito, dado que la explosión tuvo lugar a pocos metros del edificio.

La policía ha evacuado tanto la calle Istiklal como la adyacente plaza Taksim, que durante la mayor parte de la semana es escenario de enormes aglomeraciones de personas que realizan compras o acuden a las numerosas cafeterías y bares de la zona.

Las horas de la mañana del sábado son, sin embargo, más tranquilas en esta zona de ocio nocturno, por lo que la calle estaba aún poco transitada.

El domingo pasado una suicida se detonó en un coche bomba en una céntrica zona de Ankara, matando a 37 personas, en un atentado reivindicado por un grupúsculo radical de la guerrilla kurda.

El anterior atentado suicida en Estambul fue cometido en enero contra turistas alemanes en la zona monumental de la Mezquita Azul y fue atribuido a un yihadista formado por el Estado Islámico (Daesh).

Como en otros atentados, el Consejo de Radiotelevisión de Turquía (RTÜK) ha prohibido difundir imágenes del lugar.