La queja era general debido a que en la mayoría de farmacia las mascarillas estaban agotadas, otros aseguraban que había sobreprecios. Una distribuidora entre Boyacá y Alejo Lascano, era la única que aún tenía mascarillas en stock, el cual se terminó a las 12:15.
Gipsy Alvarado, logró comprar la última caja, «esta es la última, pero dijeron que en un par de horas van a realizar un abastecimiento», indicó. La caja de mascarillas N95 de 20 unidades se las podía encontrar en alrededor de $ 60. Gel antibacterial y alcohol también era demandado por los guayaquileños, pero estaba escaso.
En Quito, ocurrió la misma situación varias farmacias mostraban desabastecimiento de estos productos, a pocas horas que se diera a conocer el primer caso de COVID-19 en el país. Aunque el movimiento alrededor de los establecimientos farmacéuticos parecía normal, varias vendedores consultadas por este diario dijeron que sí llegaron bastantes personas, tras recibir la noticia de la señora de 70 años que había ingresado al país con coronavirus.
Daniel Tamayo acudió a la farmacia Sana Sana, de la Inglaterra y Mariana de Jesús. «Ya no hay mascarillas, ahora tendré que usar aunque sea un pedazo de tela» lamentó. Está preocupado luego de escuchar la noticia por la televisión. Por su parte, Fabián Guamán, llegó con su esposa y dos hijos pequeños, también en busca de insumos para protegerse. «Vamos a seguir buscando por otro lugar», dijo con pesar.
La ministra de Salud, Catalina Andramuño, indicó que el uso de las mascarillas es cuando “tenemos sintomatología respiratoria, o cuando estamos en contracto con algún paciente confirmado por coronavirus”. Por su parte, el Gobernador del Guayas, Pedro Pablo Duart, dispuso se realicen controles para evitar la especulación de precios en insumos médicos y preventivos.
Fuente: El Telégrafo, nota original: LINK