Este sábado 18 de mayo, en su natal Chone (norte de Manabí), de forma apresurada y nulo resguardo policial, se le dio sepultura a Claudia Martínez, la funcionaria de Portoviejo muerta a tiros el día anterior.
La misa se realizó en la iglesia San Cayetano y duró media hora. Luego, su cuerpo fue trasladado al cementerio Jardín de los Recuerdos.
De su lado, la Alcaldía de Portoviejo no realizó ningún homenaje a Martínez ni levantó una capilla en su sede. Solo se emitió un breve comunicado donde se lamentó lo sucedido. Durante los actos fúnebres en Chone tampoco se vio presencia de funcionarios municipales.
Martínez, con 38 años al fallecer, se desempeñó como directora de Seguridad Ciudadana y control Territorial del Municipio de Portoviejo, cargo en que apenas llevaba un mes.
Murió acribillada de siete impactos de bala el 17 de mayo de 2024, mientras manejaba un carro en la avenida Reales Tamarindo hacia el acto de inauguración de una calle.
Antes, había sido funcionaria del Servicio Nacional de Atención a Personas Privadas de Libertad (SNAI). Entre los cargos que ocupó, en 2019, fue analista 4 CRS Portoviejo.
El alcalde Javier Pincay, quien también ha sido blanco de atentados, pidió al Gobierno Nacional militarizar al cantón portovejense, aunque no hay respuesta oficial.
Los hechos de criminalidad ubican a la capital manabita como el segundo distrito más violento de Manabí.
Fuente: Primicias