Con el nuevo año, las planificaciones, promesas y proyectos se aceleran. Para evitar dar bandazos, lo mejor es diseñar una estrategia. En este caso, una gestora de pensiones, Principal, ha elaborado una guía que puede ser de utilidad para mantener ese rumbo firme.
Enero: Elabore su presupuesto anual
El primer paso es hacer una lista de ingresos y gastos. Si ya tiene la costumbre de anotar sus pagos y gastos, le será muy fácil elaborarlo, pero si no es así, aconsejan considerar todos los gastos que pueden darse durante el año, como el gasto en alquileres, pago de la hipoteca, seguros, colegios, servicios como agua, luz, teléfono, Internet, transporte, alimentación, ocio, etc. También aconsejan identificar aquellos gastos innecesarios y establecer prioridades.
Febrero: Invierta en un fondo de inversión para imprevistos
Uno nunca estará preparado para emergencias o accidentes inesperados, pero un fondo especial para imprevistos puede ayudar mucho, al menos a reducir la tensión económica-financiera del problema. Esos ahorros pueden cubrir ante un accidente o pérdida de empleo totalmente inesperada.
Marzo: Meta y disciplina financiera
De nada sirve que ahorre sin un objetivo bien definido, ya que al final corre el riesgo de utilizar este ahorro en compras no planeadas. Defina el objetivo y el plazo.
Abril: Control en sus pagos
Nunca descuide pagar a tiempo aquellos compromisos de pagos que haya adquirido. Que sus deudas no le controlen, anticipe las posibles consecuencias de los intereses y cúbralos para que los números rojos no tomen el control de sus finanzas.
Mayo: Invierta la fórmula del ahorro
Estamos acostumbrados a ahorrar lo que nos sobra a fin del mes, pero el problema es que al final del sueldo nos sobra mucho mes. Por eso el consejo es invertir la tradicional fórmula y pasar de considerar el ahorro como el resultado de los ingresos menos los gastos a gastar lo que queda tras haber ahorrado una parte de los ingresos.
Junio: Ahorre para tu retiro el 10% de lo que gane
Una regla de oro de la que hablan algunos expertos es ahorrar no menos de una décima parte de ingresos, en previsión para el futuro. Pocas veces pensamos en nuestra jubilación y cuando empezamos a preocuparnos por una pensión digna, quizá ya es demasiado tarde.
Julio: Genere ingresos extra
Además de ahorrar parte de la paga extra y no gastarla toda en vacaciones, otro consejo puede ser tratar de generar ingresos extra, con algún hobby, vendiendo creaciones a través de sitios web o dando clases en el tiempo libre.
Agosto: Evite hipotecar su salario
Recuerde que las tarjetas de crédito no son una extensión de su salario. Procure evitar hipotecar su nómina mediante el uso excesivo de las mismas. Identifique muy bien sus compras mediante un esquema de pago a «meses con o sin intereses» y reserve este método para aquellos pagos cuyo valor sea por lo menos del doble de su tiempo de vida..
Septiembre: Gastos que le generan ahorros
A veces es muy difícil distinguir entre un deseo, un impulso y una verdadera necesidad. Por eso, procure no hacer compras compulsivas, sino racionales. Por ejemplo, planteándose si un gasto puede generar un ahorro.
Octubre: Invierts en fondos de inversión
Seguramente para esa fecha ya habrá ahorrado un importe significativo.Una buena herramienta para conservar el valor de su capital y mantenerlo a salvo de la inflación podría ser abrir un fondo de inversión que le permita hacer crecer su dinero. Un asesor ayudará en este punto.
Noviembre: Educación financiera
Una vez que haya experimentado por su propia cuenta la satisfacción de ahorrar e invertir, fomente la cultura del ahorro con sus hijos o su familia.
Diciembre: Potencialice su extra de fin de año
El último mes del año es ideal para sacar provecho a la paga extra o el bono de fin de año, en caso de tenerlo. Los expertos aconsejan gastar con cautela, o tenerlo a la hora de decidir su uso.