Para llegar a este momento, Iza, presidente de la Conaie, recorrió varias de las comunidades de la Sierra, Costa y Amazonía difundiendo el mensaje de que el gobierno de Guillermo Lasso ha incumplido diez propuestas y debe “entender” que hay que hacer cambios y atender a los sectores sociales.
El objetivo es propiciar un levantamiento indígena similar al de 1990, que se iniciará en los territorios y se ejecutará con el cierre de carreteras, con concentraciones en las gobernaciones, manifestaciones en las calles de las diferentes ciudades, en esencia, como decidan los grupos sociales.
En estos espacios, Iza se lamenta de los altos precios de los productos de primera necesidad que nadie controla; de la precariedad de los hospitales públicos; de los precios de los combustibles; de que no se atiende a los agricultores; que no se promueven créditos para la producción; de la política neoliberal de Lasso; de que se busca privatizar empresas públicas; que se alistan reformas legales para promover el trabajo por horas; que se respeten los 21 derechos colectivos, entre otros ejes.
En esa línea, convocó a los gremios de trabajadores, productores bananeros, maestros, agricultores, estudiantes, y especialmente a los transportistas a que se unan a esta paralización que tiene el carácter de indefinida.
Para llamar la atención de los transportistas criticó por ejemplo que se esté planificando “cambiar” los tipos de combustibles que se venderán en el país, medida que “afectará al transporte público y beneficiará a las empresas privadas”. “Quienes van a salir más perjudicados son los taxistas y el transporte público. Colaboremos con nuestras luchas, no es posible sostener una canasta básica con estos precios, no hay una política de control. Colaboremos, incluso no saliendo de la casa para que podamos hacer escuchar nuestra voz de protesta”, expresó en una entrevista en Hemisférico TV.
De su lado, en la última semana, la Conaie profundizó una campaña en sus redes sociales convocando a la unidad a este levantamiento, acompañando un manifiesto que recoge estas diez demandas:
- La reducción y no más subida del precio de los combustibles.
- Moratoria de un año en el sistema financiero para que las familias paguen sus deudas.
- Precios justos en los productos del campo.
- Empleo y derechos laborales.
- No minería en territorios indígenas ni fuentes de agua.
- Respeto a los 21 derechos colectivos.
- No privatización de los sectores estratégicos.
- Políticas de control y especulación de precios.
- Presupuesto urgente para salud y educación.
- Generación de políticas públicas de seguridad y protección.
Adicionalmente se compuso una canción exclusivamente para entonarla en el paro, cuya letra media entre kichwa y español y en su mensaje se advierte a Guillermo Lasso que salga corriendo porque lo van a botar.
“Ay karaju” dice el coro, mientras una imagen de la cara de Lasso aparece impregnada con la letra: “Ladrón inútil, llegó tu día. La gente del páramo despertó, sal corriendo, te vamos a botar”.
Continúa: “Ay, este pueblo no se ahueva ni de los chapas ni del gobierno. Ay si es de morir, moriremos en las calles resistiendo”, dice el cántico.
La movilización tiene el carácter de indefinida porque es el “momento de hacer un pare, y ese momento es este mes, porque el Gobierno debe entender, porque estamos cansados de sus mentiras”, recalcó Iza.
A su propuesta se unió la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía (Confeniae), uno de los brazos de la Conaie, que anunció que están listos para la movilización convocada para este lunes.
Severino Sharupi, dirigente amazónico, exigió al régimen la derogatoria de los decretos 151 y 95, relacionados con la explotación petrolera, precios justos para sus productos, atención en salud y educación y en contra del alto costo de la vida. “Estamos listos para la movilización”, exclamó el pasado jueves en una convocatoria a la prensa de Pastaza.
A su mensaje se unió Marlon Vargas, presidente de la Confeniae, quien convocó a los sectores sociales a plegarse a la medida, en una acción similar a las manifestaciones de octubre del 2019.
“¡Si hacen sus decretos, nosotros también haremos nuestros decretos, si declaran estado de excepción, nosotros también declararemos estado de excepción, si hacen toque de queda, nosotros también haremos toque de queda, en nuestro territorio mandamos nosotros!”, declaró.
Aseveró que “esta lucha va a ser duradera” y que cada territorio se organizará para protestar. “La movilización es indefinida, se convierte en un levantamiento indígena y en un paro”, insistió Vargas.
Otros sectores como la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin) y el Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador (Feine) ratificaron su participación en este levantamiento, luego de una cita que mantuvieron el jueves último. Al igual que la Unión Nacional de Educadores (UNE), que informó que respaldarán la medida de hecho de la Conaie.
Mientras se preparan estas acciones, el Gobierno alertó que no se permitirán desmanes.
El ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, consideró que Iza y los movimientos sociales están en su derecho de criticarlos. Pero “no vamos a permitir que las calles sean caotizadas, vamos a actuar con la Constitución y la Ley”, indicó en una entrevista en radio Democracia, en la que añadió que no están cerrados al diálogo, aunque “ni siquiera tenemos claro qué es lo que están alegando”.
A la par de este levantamiento, el Frente Unitario de Trabajadores (FUT) se alista también para realizar una movilización nacional el próximo 22 de junio, en contra del Gobierno nacional.
Fuente: El Universo – Nota original: LINK
