Por 23 votos a favor y 11 en contra, el Senado estatal aprobó al filo de la medianoche del viernes un proyecto de ley que ya cuenta con el visto bueno de la Cámara de Representantes estatal.
El proyecto pasará ahora a la oficina del gobernador del estado, el demócrata Dan Malloy, quien deberá ratificarlo antes de su entrada en vigor, según el periódico local Hartford Courant.
«Los padres no deberían verse obligados a elegir entre romper la ley o hacer lo necesario para intentar llevar alivio a sus hijos enfermos», dijo antes de la votación el senador Eric Coleman.
Por su parte, la senadora Toni Boucher reiteró su oposición a una ley que, según dijo, causará «más daño» a los niños dándoles acceso a una sustancia cuyos efectos beneficiosos «son experimentales».
De confirmarse finalmente, Connecticut se unirá a otros estados del país donde el uso de la marihuana con fines médicos para menores de edad ya es legal.
Actualmente, 23 estados tienen leyes que permiten el consumo de marihuana con fines medicinales y otros cuatro, además del Distrito de Columbia, han legalizado su uso con fines recreativos.
La industria de la marihuana en Estados Unidos movió en 2015 unos 5.700 millones de dólares y genera al año más de 100.000 empleos, según un estudio publicado esta semana por dos grupos del sector.
Al ritmo actual, se espera que en 2020 genere un mercado de 22.800 millones de dólares, de los que la mitad provendría del uso medicinal y la otra mitad del recreativo.