«La campaña electoral será muy sucia, como siempre están acostumbrados a hacerla. Como no tienen nada de qué acusarnos, solo pueden difamar. Tratarán de robarnos el tesoro más preciado: nuestra integridad», dijo el gobernante.
La «prensa mercantilista seguirá siendo nuestro principal adversario. Sin ella, la oposición ni siquiera existiría», apuntó Correa.
«Se nos viene un nuevo proceso electoral, una nueva batalla y una nueva victoria», dijo Correa en un discurso durante la celebración de su noveno aniversario en el poder, pues asumió su primer mandato el 15 de enero de 2007 y considera que Ecuador cambió «para bien».
«Vamos a defender lo que hemos ganado, lo que el país ha logrado. Podrán mentir, podrán calumniarnos como lo han hecho siempre, pero nunca nos robarán la esperanza y nuestra firme decisión de tener patria para siempre», indicó.
Durante la celebración en Guayaquil, Correa se refirió a las complicaciones económicas del país en 2015, debido, entre otros, a inversiones finales en infraestructura, la baja del precio del barril de petróleo en el mercado internacional y la apreciación del dólar.
La oposición considera que Correa no ahorró en épocas favorables para la economía y le reprochan lo que creen es un exceso de gasto en el sector público que, el Ejecutivo por su parte, asegura es inversión en obras, entre ellas sociales y de infraestructura.
Aunque una reciente modificación a la Constitución permite la reelección indefinida de cargos de elección popular, también incluyó una disposición transitoria que impide postular en 2017 a quienes han ejercido el cargo por dos períodos consecutivos, como es el caso de Correa.
El gobernante, líder del movimiento oficialista Alianza País, ha mencionado a su exvicepresidente Lenín Moreno, a su actual segundo gobernante, Jorge Glas, al canciller, Ricardo Patiño, y al ministro del Interior, José Serrano, entre otros, como eventuales sucesores.
Hasta el momento Guillermo Lasso, líder del movimiento CREO, la mayor fuerza de oposición en la Asamblea, y Abdalá Bucaram, exasambleísta e hijo del expresidente del mismo nombre, han expresado públicamente su intención de participar en las elecciones presidenciales de 2017.