«La Alianza Nacional Cubana de Ecuador aplaude esta decisión, ya que somos de la opinión (de) que nada es más importante que la vida», dijo la entidad en un comunicado publicado en su cuenta de Facebook.
Los cubanos llevan entre un mes y mes y medio en un centro de acogida para inmigrantes conocido como «Hotel Carrión», en Quito, y solicitan a las autoridades de Migración que se pronuncien sobre su situación, ya que ni se ejecutan las deportaciones ni se les deja en libertad.
Según la ANCE, las condiciones de higiene y alimentación «son pésimas» en ese lugar, aunque el Ministerio del Interior asegura que el centro «cumple con los parámetros de seguridad, diseño e infraestructura idónea» y «con el debido respeto a los derechos humanos».
Explicó que reciben alimentación tres veces al día y disponen de servicio médico, psicológico, asesoría jurídica y de actividades de recreación, «sin vulnerar ninguno de sus derechos».
En un comunicado, Interior dijo el 11 de mayo que el proceso de deportación del grupo se ha extendido porque Migración y el consulado de Cuba «deberán solicitar la autorización de embarque y de aceptación» de Guayana para la repatriación de cinco de ellos a ese país, ordenada por el juez.
En cuanto a dos miembros del grupo para los que se emitió resolución de salida a Brasil, no podrán ser enviados a ese país porque la Embajada brasileña «ha informado que los ciudadanos necesitarían visa para ingresar a esa nación».
Odelbys Martínez, integrante del grupo, confirmó hoy a Efe que la decisión de poner fin a la huelga de hambre fue adoptada el viernes «porque no hay respuesta» y se quejó de que las autoridades de migración les dicen «una mentira tras la otra».
«Tenían que darnos una respuesta y no han dado ninguna respuesta», señaló la ciudadana cubana al comentar que en varias ocasiones les han dicho que «en diez días» se aclarará su situación, cosa que no ha ocurrido y que les han vuelto a repetir hoy los responsables de Migración.
Según Martínez, la situación se ha complicado en el «Hotel Carrión» tras el cese de la huelga, porque la comida que les dan «está podrida», lo que ha motivado nuevas protestas a las que se han sumado otros extranjeros que también están en el centro.
La abogada de la Defensoría Pública Nina Guerrero, quien representa a los emigrantes, de otro lado, indicó a Efe que ha solicitado a la autoridad judicial la presentación periódica de los cubanos ante las autoridades como medida que les permitiría abandonar el «Hotel Carrón» en tanto se ejecutan las órdenes de deportación.
Guerrero agregó que tiene previsto reunirse mañana con los ciudadanos cubanos para explicarles las gestiones realizadas e informarles de la situación en que se encuentran sus casos.