La testigo, que rindió su versión desde el CRS Femenino de Quito, indicó que no conocía a Espín ni a la abogada Yadira Cadena. Aseguró que ambas le ofrecieron, entre otras cosas, asilo en Bélgica y protección de la ONU.
Según la exagente policial, quien leyó un texto con su declaración, narró que Espín le pidió que se retractara de su versión que perjudicaría al expresidente Rafael Correa en el proceso investigativo en el caso Balda.
Por su parte, el ministro de Justicia (e), Paúl Granda, ratificó ante la Comisión Legislativa que se violaron las normas en la visita a Diana F., que es uno de los testigos protegidos del caso Balda. El funcionario realizó un recuento cronológico de la entrada de Espín el 24 de septiembre pasado al centro de rehabilitación de Chillogallo donde se encuentra detenida Diana F.
Granda sostuvo que Espín estuvo acompañada de Yadira Cadena, quien es parte del equipo de abogados del ex presidente Rafael Correa, uno de los indagados por el supuesto secuestro de Fernando Balda.
Granda recalcó que no existen registros del ingreso de la asambleísta, solo de la abogada Cadena. Además, aseveró que los custodios del centro fueron engañados en dos ocasiones por las visitantes. La primera fue al entrar a la cárcel cuando aseguraron que irían al Departamento de Psicología y luego aseverando que son parte de la defensa de Diana F.
Por estas falencias de seguridad fue separada la coordinadora del centro de detención y se abrieron sumarios administrativos contra los guías penitenciarios que permitieron el ingreso. Según Granda, el Ministerio de Interior también indaga a los policías que estuvieron encargados de la vigilancia del exterior de la prisión.
El Ministro recalcó que la entrada de Espín y Cadena violó las normas para las visitas ordinarias, que solo pueden cumplirse los días sábados y tampoco cumplió con los requisitos de las visitas extraordinarias que deben ser aprobadas por el Ministerio de Justicia.
Por su parte, Espín aseguró que no atentó contra las reglas de seguridad del centro de rehabilitación y que su visita fue aceptada por Diana F.. La legisladora sostuvo que se acercaron a la testigo protegida a pedido de ella mismo.
Luego de la visita, Diana F. recibió una supuesta amenaza. Según Granda, para protegerla fue ubicada en otra celda y se le da más protección.
Fuente: El Telégrafo – Nota original: LINK