En esta jornada egresaron estudiantes en las localidades de Cayambe, Guamaní y Calderón, en la provincia de Pichincha, tras dos años de estudios que iniciaron en abril de 2012 con el apoyo de profesionales en ciencias médicas de la isla caribeña que prestan servicios en esta nación.
Trabajar con la comunidad en la prevención y promoción de salud, identificar los factores de riesgo y servir de enlaces con los centros médicos, serán las principales responsabilidades de los técnicos, declaró a Prensa Latina la Máster cubana en Atención Integral al Niño, Caridad Guardado.
La también Coordinadora de Articulación entre el Instituto Tecnológico Superior Sucre de Ecuador y el Ministerio de Salud de Cuba explicó que los egresados tienen como prioridad conocer a las familias de sus comunidades, por ello realizarán visitas a hogares y trabajarán directamente con equipos de médicos.
“Con las actividades de prevención que los técnicos deben desplegar se pretende disminuir las enfermedades y la mortalidad, enfatizando en el programa materno-infantil”, sostuvo Guardado.
Los 71 técnicos que alcanzaron su graduación en esta jornada fueron seleccionados por los pobladores de sus propias comunidades para estudiar la disciplina en el Instituto Tecnológico Superior Sucre.
“Ellos serán los representantes de la salud pública en sus comunidades, les corresponde ahora interactuar con el pueblo, identificar riesgos y contribuir a elevar la calidad de vida de la población”, aseveró la profesora Guardado, quien participó junto a otros colegas cubanos en la formación de este personal de la salud ecuatoriano.
La analista de la Dirección Nacional de Normatización del Talento Humano en el Ministerio de Salud, Mayra Merino, señaló que con esta promoción suman 1.518 los graduados como técnicos en atención primaria este año.
Precisó que para 2016 la matrícula ronda las 500 personas de todas las provincias del país, a partir de rigurosos procesos de selección que se están desarrollando.
Entre los requisitos para ingresar a la carrera se requiere ser líderes comunitarios, elegidos por su población, y vivir en el lugar que los postula; además, ser mayores de 18 años de edad, bachilleres, y pasar un proceso de selección que incluye una entrevista en una primera etapa, y en la otra, aprobar al examen nacional para ingresar en la educación superior.
Dentro de ese equipo multidisciplinario cada cual tiene sus funciones específicas, el doctor brinda atención médica, la enfermera el seguimiento o el cuidado directo del paciente y el técnico se encarga de la prevención y la promoción en la comunidad, enfatizó.