Indicó que durante esta semana, la Cancillería ecuatoriana ha enviado 20 diplomáticos adicionales a los 14 consulados que tiene Ecuador en Estados Unidos, a los que se sumarán 40 consulados móviles en los próximos días, para trabajar junto a los migrantes ante la nueva política migratoria aplicada por el gobierno de Donald Trump.
“Tenemos representantes de la defensoría del pueblo del Ecuador en Estados Unidos, tres de ellos ya están en funciones y se mandará a uno más para velar por los ecuatorianos que viven en ese país, proteger sus derechos y asesorarlos”, dijo el embajador en declaraciones recogidas por el portal mexicano, Mensaje Político.
Indicó que Ecuador mantiene coherencia con su política migratoria. “Pedimos para los migrantes en el exterior, lo que nosotros hacemos en casa, en Ecuador tenemos más de 60 mil refugiados, la mayoría de ellos colombianos, que son respetados en sus derechos”, añadió.
El embajador dijo que el tema migratorio “nos une mucho con México, porque es un punto medular de la agenda de la política exterior”.
El embajador Arizaga manifestó su solidaridad con México por el anuncio, por parte del presidente estadounidense, de construir un muro en la frontera común para evitar el ingreso ciudadanos mexicanos.
Indicó que también existe un trabajo puntual con el gobierno mexicano en materia de migración para proteger a los ecuatorianos que cruzan por el país en busca de llegar a la Unión Americana.
Al respectó, destacó que el flujo de migrantes ecuatorianos deportados por las autoridades mexicanas en más de 50 % en los últimos tres años. En 2014 se registraron 1.200 repatriaciones, en 2015 fueron 900 personas y en 2016 se reportaron 500 personas.
En el ámbito de las relaciones bilaterales con México, el embajador dijo que “viven un momento excelente”.
En ese sentido, destacó que Ecuador está en busca de una mayor colaboración con diversas instituciones educativas en México para fortalecer e incrementar el número de intercambios estudiantiles.
Para ello, dijo, firmará en los próximos días un acuerdo con el Instituto Politécnico Nacional (IPN), para que un mayor número de estudiantes ecuatorianos realicen estudios en ciencias exactas y medicina.