El Gobierno dice que los tratados bilaterales de protección de inversiones, firmados por el país, no fueron determinantes en la atracción de inversión extranjera. Y esa es una de las razones que justifican la decisión de dar por terminados esos acuerdos.
La semana pasada, la Asamblea se pronunció en favor de la denuncia de 12 acuerdos. Los asambleístas usaron otra razón: la cláusula de arbitraje que contemplaban está en contra de la Constitución.
Ayer, en el Salón Amarillo del Palacio de Carondelet, el presidente saliente recibió el informe de la Auditoría Integral Ciudadana de los Tratados de Protección Recíproca de Inversiones, creada por él mismo en 2013. El ánimo no era favorable a los TBI: para los oficialistas eran documentos “abusivos” o un “atentado a la justicia” y hubo “negligencia” en su negociación.
Fuente: Expreso