El vicepresidente de Samsung, Lee Jae-yong, que se espera suceda a su padre enfermo al frente del mayor conglomerado del país, ha sido convocado para ser interrogado por sospechas que incluyen el soborno, dijo el miércoles la fiscalía.
Lee y otros líderes empresariales de Corea del Sur han enfrentado a cuestionamientos sobre las donaciones de sus empresas a dos fundaciones controladas por Choi Soon-sil, la mujer en el centro del creciente escándalo. Choi era amiga y confidente de la presidenta surcoreana, Park Geun-hye, quien enfrenta un juicio político, después de que los legisladores votaran a favor de su destitución el mes pasado, que tendrá que ser ratificada por el Tribunal Constitucional.
Según los fiscales, las donaciones se hicieron a cambio de favores políticos.
Samsung declinó hacer comentarios sobre la investigación.
Durante un interrogatorio público por parte de los legisladores, el mes pasado, Lee negó las acusaciones. Dijo que Park no le pidió directamente apoyar a las fundaciones de Choi y que no estaba al tanto de los pagos de Samsung a las mismas.