Si bien el Papa Francisco reconoce que es necesario que la eucaristía llegue a estos lugares, se limita a pedir que se rece para que crezcan las vocaciones y que se envíen más misioneros a estas zonas.
En este documento de 52 páginas, dividido en 111 puntos, el Papa recoge sus reflexiones tras el Sínodo de los obispos que se celebró en octubre de 2019 y en el que se abordaron los problemas que atraviesa la región amazónica y sus pueblos originarios.
Francisco se limita «a exhortar a todos los Obispos, en especial a los de América Latina, no sólo a promover la oración por las vocaciones sacerdotales, sino también a ser más generosos, orientando a los que muestran vocación misionera para que opten por la Amazonía».
Fuente: El Telégrafo, nota original aquí: LINK