El papa Francisco no ha recibido ninguna petición formal para recibir a familiares y víctimas de casos de pederastia cometidos por curas australianos y que estuvieron esta semana en Roma, según el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi.

El papa Francisco no ha recibido ninguna petición formal para recibir a familiares y víctimas de casos de pederastia cometidos por curas australianos y que estuvieron esta semana en Roma, según el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi.

«Ni a la Secretaria de Estado, ni a la secretaria del papa ha llegado la petición formal y correcta para un encuentro», explicó Lombardi, que negó cualquier tipo de solicitud para una audiencia con este grupo de 20 personas.

Este grupo se encontraba en Roma en estos días en el que el «ministro» de Economía vaticano, el australiano George Pell, fue llamado a prestar declaración por videoconferencia ante la comisión que investiga los abusos a menores cometidos entre las décadas de los años 70 y 90 en las ciudades australianas de Ballarat y Melbourne, de la que fue arzobispo.

Los portavoces de las víctimas aseguraron en reiteradas ocasiones que estaban haciendo todas las gestiones para poder ser recibidos por el pontífice argentino.

Lombardi explicó que el grupo que representa a las víctimas de los abusos por parte del clero australiano fueron recibidos en dos ocasiones, ayer y esta mañana, por la Comisión para la Tutela de Menores que el papa constituyó en 2014.

Ayer mantuvieron una reunión con el padre Hans Zollner, vicerrector de la Universidad Gregoriana y responsable del departamento de Psicología, y miembro de esta comisión.

También se produjo un largo encuentro con el cardenal y exarzobispo australiano George Pell, que en sus declaraciones en estos cuatro días evitó asumir responsabilidades de cuando era arzobispo, pero sí admitió que se encubrieron abusos sexuales a menores.