En Notimundo, con Patricia Terán y Freddy Paredes, el presidente de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (ABPE), Julio Prado, aseguró que durante el 2015 se sintió un “shock económico” debido a varios factores que desaceleraron la economía ecuatoriana. Uno de esos factores es la caída del precio del petróleo que, precisamente, este lunes alcanzó los 23,41 dólares.
Prado afirmó que el 2015 cerró con una disminución de los depósitos en un 11%. Para compensar esta caída, la banca ha reducido la entrega de créditos, que también tuvo una baja del 4%.
La caída de depósitos ha sido más significativa en las empresas ecuatorianas ya que el dinero ha sido utilizado para abonar las deudas que mantiene el sector privado.
El Presidente de la ABPE afirmó que el Gobierno debe implementar un plan urgente antirrecesión, argumentando que el país necesita un “shock de confianza”, es decir, que se implementen medidas a corto plazo y, además, parches económicos para enfrentar, dijo, los desequilibrios macroeconómicos fiscales de los sectores públicos y privados.
Otra solución sería la reducción de, lo que a su criterio son, trabas para obtener inversión extranjera.
En cuanto a la caída del precio del petróleo, Julio Prado aseguró que no hay proyecciones internacionales que vayan a registrar un alza significativa. Es así que dijo que el país debe prepararse para un escenario complejo en el 2016. La banca es un actor importante para la economía ecuatoriana por lo que Prado afirmó que no solo tienen depositadas reservas en el Banco Central del Ecuador (BCE), sino que, también, hay reservas en el fondo de liquidez que sirve para inyectar dinero en caso de que haya una verdadera crisis económica.
Prado aclaró en Notimundo que las reservas de la banca privada no han sido utilizada por el Estado, sino que, al contrario, aumentaron de 1.927 a 2.380 millones de dólares en las últimas semanas.
Finalmente, el Presidente de la ABPE se refirió a la aplicación del dinero electrónico y un posible timbre cambiario y aseguró que la primera fue una medida que ya había sido propuesta por la banca privada hace más de 3 años. En cuanto al timbre cambiario, dijo que el sector bancario no está de acuerdo con la implementación de esta medida ya que podría crear nuevos mecanismos de distorsión en la economía.
El trabajo de ABPE en 2016 será trabajar con todos los actores y sectores para generar una banca más competitiva y más fuerte.
