Al condenar las acciones estadounidenses en Siria y las maniobras en la zona de Corea, Kim In Ryong, embajador norcoreano en la ONU, dijo que se «ha creado una situación peligrosa en la que podría estallar una guerra termonuclear en cualquier momento en la Península y supone una grave amenaza para la paz y seguridad mundial»
Aunque esa retórica no se había escuchado antes de un diplomático de la ONU, sí es lenguaje típico de la delegación de Corea del Norte.
Pyongyang está claramente alterado por el nuevo gobierno de Estados Unidos que ha dicho que la doctrina de «paciencia estratégica» con Corea del Norte se ha acabado.
El embajador norcoreano, leyendo un comunicado, les dijo a los reporteros que EE.UU. estaba «alterando la paz mundial y la estabilidad insistiendo en una lógica de gángsters que es la invasión de un Estado soberano es ‘decisivo y proporcionado’ y contribuye a ‘defender’ el orden internacional en su intención de aplicarla a la península coreana también».
El diplomático añadió que su país está listo para reaccionar a cualquier «modelo de guerra» de EE.UU..
Al embajador se le pidió responder al comentario del presidente de EE.UU. Donald Trump de este lunes cuando dijo que Corea del Norte debería «comportarse mejor», pero dijo que no comentaría.