Las entidades públicas que laboran en Quito batallan a diario para contener la expansión del coronavirus entre sus empleados.
Algunas han vuelto al teletrabajo y han cerrado sus puertas temporalmente. La curva de contagios ha ido en ascenso y ayer, 15 de julio del 2020, superó los 10 000 positivos en la capital.
Solo en los primeros 15 días de este mes se han registrado 3 464 nuevos casos, lo cual representa el 34,5% del total. Los servidores retomaron las actividades presenciales el pasado 29 de junio, pero en casos como la Prefectura de Pichincha optaron por suspender la atención al público.
Como medida preventiva se cerró el edificio central desde ayer para fumigar oficinas, parqueaderos y flota de autos. La mitad del personal se mantendrá en teletrabajo y el resto labora en territorio, mientras que el 25% de salud, vialidad y riesgo está operativo en casos de emergencia.
La Prefectura tiene 2 339 trabajadores y 11 han dado positivo al covid-19. Ellos se encuentran en aislamiento. En esta entidad se tomaron 23 medidas, entre ellas, la aplicación de pruebas rápidas a más de 1 500 servidores.
En el caso de la Agencia Nacional de Tránsito (ANT), la atención se cerró ayer y hoy, 16 de julio, para desinfectar las instalaciones y aplicar pruebas PCR a sus funcionarios.
La mayoría de instituciones han fijado sus propias reglas para mantenerse seguras, pues el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional solo estableció que vuelvan a laborar en un 50% y en horarios diferenciados.
El ente no especificó un protocolo de bioseguridad y pruebas de diagnóstico para el personal. Asimismo, hasta el pasado 12 de julio, en las 41 entidades, que forman parte de la Municipalidad, había 1 258 empleados infectados con el virus.
De esta cantidad, el 62% de estos casos se concentra en cuatro empresas: Agua Potable, Aseo, Agencia Metropolitana de Tránsito y Cuerpo de Agentes de Control.
Justamente el personal de las dos últimas entidades está en primera línea controlando que la enfermedad no siga expandiéndose en el Distrito.
Las 37 entidades restantes tienen menos de 100 casos cada una, por lo que han tenido que reforzar la prevención. Hay 22 000 trabajadores municipales y de estos el 25% han estado trabajando de forma presencial, el resto continúa trabajando en sus domicilios.
Hay entidades que han optado por mantenerse en teletrabajo, por ejemplo, las oficinas del Consejo de Participación y Control Social (CPCCS), que solo estaban abiertas para limpieza y desinfección diaria. Esta semana fueron cerradas.
El familiar de un chofer dio positivo y hay otros tres servidores en espera de resultados por haber estado en contacto directo con infectados, mientras que dos empleados más ya están recuperados.
Por su parte, la Contraloría ha seguido en teletrabajo y, solo en temas puntuales, los funcionarios trabajan en las oficinas o en las entidades donde realizan auditorías.
Pero pese a estas medidas, hay 28 contagiados en la capital y un total de 58 a escala nacional. En la planta central del Consejo Nacional Electoral (CNE) han venido trabajando 65 personas, que equivalen al 25% de la nómina.
Esta semana se tomaron muestras al personal y aún no entregan los resultados. El Ministerio de Transporte y Obras Públicas implementó turnos rotativos para que el 30% de su personal labore, de 08:00 a 14:00, sin horario de almuerzo para evitar el contacto con alimentos.
La entidad informó que menos del 1% del personal está contagiado. La Corte Constitucional, en cambio, desarrolló un sistema informático que permite a los funcionarios y usuarios externos trabajar e interactuar a través de medios telemáticos.
En promedio asisten 54 personas diariamente (22% del personal) y tres han dado positivo, quienes están en casa y en condición estable. El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), 210 servidores están en teletrabajo y 160 presencial.
Dos personas están en sus hogares recuperándose de la infección. En la Asamblea Nacional hay 46 funcionarios infectados, entre asambleístas y asesores, entre ellos está el legislador, César Litardo, quién está en su casa en Quevedo.
Esta institución cuenta con protocolos de bioseguridad, que incluye una declaración de salud y un monitoreo permanente por parte del personal de salud ocupacional.
En las plataformas gubernamentales del norte y sur de la ciudad se trabaja al al 25% de su capacidad y no han registrado casos positivos.
Verónica Rodríguez, gerente de ambas plataformas, explicó que en el norte, en donde operan entidades del sector financiero, hay 700 personas usuarios al día. En ambos sitios se aplican medidas de bioseguridad.
Fuente: El Comercio-Nota Original : LINK