La acusación de Rusia de que Turquía se está preparando para invadir Siria es "ridícula", ha dicho hoy el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, durante su visita a la capital senegalesa Dakar.

«Sólo podemos responder con la risa a esta actitud de Rusia. Antes (de acusar a Turquía), Rusia debería rendir cuentas por la gente que muere ahora mismo en territorio sirio y que ya llegan a 400.000», dijo Erdogan a la agencia semipública turca Anadolu.

El portavoz del ministerio de Defensa ruso, Ígor Konashénkov, aseguró el jueves tener «importantes razones» para sospechar que Ankara realiza «intensos preparativos para una invasión militar de Siria».

«Es Rusia quien está en estos momentos ocupando Siria. Tiene una base naval en Tartus y una aérea en Latakía y se esfuerza para crear un Estado a medida para (el presidente sirio Bachar al) Asad, porque Asad está acabado en Siria», acusó Erdogan.

Agregó que el grupo yihadista Estado Islámico (EI) y otras organizaciones «se reparten Siria» y que esto significa una «amenaza para Turquía», dado que comparte 911 kilómetros de frontera con el país vecino.

«¿Acaso Rusia o Irán comparten frontera (con Siria)? ¿Entonces ¿qué hacen allí? Dirán que Asad los invitó. Pero no se puede aceptar cualquier invitación. Porque allí está Asad, un opresor y asesino que emplea terrorismo estatal. Quién le respalda comparte la culpa», advirtió el presidente turco.

Turquía y Rusia pasan por una grave crisis diplomática desde que el pasado 24 de noviembre cazas turcos derribasen un bombardero ruso en la frontera con Siria.

Ankara asegura que el bombardero ruso había violado su espacio aéreo, algo que Moscú niega.

En Dakar, Erdogan se reunió con el presidente Macky Sall y numerosos ministros del Gobierno senegalés, en una breve escala que incluía una ceremonia militar en el propio aeropuerto.

El presidente regresa hoy a Turquía tras un viaje iniciado el martes que incluía visitas oficiales a Chile, Perú y Ecuador.