El ministro de Agricultura y Ganadería, Eduardo Izaguirre, informó que alrededor de 30.000 toneladas de arroz se importarán de Colombia, para garantizar la “soberanía alimentaria” en el país. En Notimundo A La Carta, la vocera del Frente de Organizaciones Sociales Agrícolas, Alexandra Plúas, señaló que la especulación de precios depende de las piladoras y los industriales.

El Telégrafo

La vocera del Frente de Organizaciones Sociales Agrícolas, Alexadra Plúas, mostró su preocupación ante el arribo de arroz importado de Colombia, mientras asegura que “sí hay arroz” en el país. “Pedimos justificaciones del por qué de la importación de arroz de Colombia, cuando a nosotros los productores medianos y pequeños, nos han hablado de un excedente de arroz de 200 mil toneladas”, dijo.

Aclaró que la especulación y subida del precio del arroz en el país, no se da por una fijación de los productores. De acuerdo con la vocera, los precios los ponen las piladoras y personas del sector industrial. “Es una cadena del eslabón que va de mano en mano, hasta llegar a la tienda del barrio y de ahí es donde se especulan los precios”, sostuvo.

“Somos conscientes de que la subida de precio nos está perjudicando como arroceros, pero quien se está beneficiando son los intermediarios (…) Las grandes industrias, tiendas y supermercados se están favoreciendo a costa del pueblo productor”, resaltó.

Para Plúas, una de las mayores preocupaciones es qué pasará con sus cosechas cuando las 30.000 toneladas de arroz colombiano lleguen al país. Señaló que, el producto nacional no podría competir con uno del exterior, cuyo precio resulta más accesible al consumidor.

Por otro lado, mencionó que ya se inició el periodo de siembra, frente a un eventual fenómeno de El Niño. “Por el momento, hay arroz recién sembrado, otro que está saliendo y hay arroz que se seguirá produciendo (…) Tenemos arroz suficiente”, puntualizó.

Asimismo, la vocera Alexandra Plúas destacó la importancia de realizar un censo agropecuario, que, a su criterio, no se ha realizado desde hace más de 20 años. “Si no hay un censo agropecuario, no se sabe con exactitud las estadísticas de estadiaje que se siembran y no se siembran”, finalizó.

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