El comandante del ejército general Luis Castro recordó durante la ceremonia, efectuada en el Colegio Militar, al norte de Quito, la valentía de los soldados que ofrendaron su vida por defender nuestra soberanía el 26 de enero de 1995, lo que “nos permitió obtener la victoria más importante en la historia de las Fuerzas Armadas”.
El general Castro rememoró a los 33 militares caídos en combate, 103 heridos y 136 soldados que además lograron la unidad de todo un pueblo y ayudaron a consolidar nuestra autoestima.
El ministro de Defensa, Ricardo Patiño, se sumó al homenaje y durante su intervención destacó la heroicidad de los militares, a quienes calificó como verdaderos héroes de la patria y agradeció por la defensa que hicieron de la patria. Reconoció también el sacrificio de las familias de los soldados, especialmente de los caídos en acción.
Por eso, al final de la ceremonia las autoridades castrenses entregaron medallas de honor, como símbolo de agradecimiento, a los parientes de los combatientes fallecidos que asistieron al homenaje. Patiño mencionó que la gesta del Cenepa permitió la firma de la paz definitiva con el Perú en 1998 y empujó el cierre definitivo de todas las fronteras terrestres y marítimas con los países limítrofes.
El ministro destacó que en el 2010, el Ecuador presentó la Carta Náutica con las coordenadas que fijaban los límites en el mar territorial, la cual fue reconocida por las Naciones Unidas.
En el 2012 se firmaron los límites marítimos con Colombia, luego en el 2014 con Costa Rica, “la gloria del Cenepa iluminó todos estos logros de paz”. Asimismo, indicó que ahora se trabaja en conjunto con las Fuerzas Armadas del Perú para temas de seguridad y de combate al crimen organizado en el cordón fronterizo.
Además, la paz ha permitido también trabajar conjuntamente en el desarrollo de esa zona con proyectos binacionales que han beneficiado a más de 4 mil localidades con atención en infraestructura y en temas de desarrollo comunitarios.