Criterios favorables, anuncios de movilización y hasta críticas a la Corte Constitucional (CC) son las primeras reacciones de sectores sociales, políticos y gremiales ante la eliminación de las enmiendas aprobadas en 2015.
Fue la Contraloría la primera en manifestarse. En un comunicado expresó que hubo una dilatada falta de decisión de la Corte en tomar esta decisión. “Se produce luego de reiteradas excitativas por parte de la Contraloría General del Estado, que demandó la inconstitucionalidad de las reformas”.
Organizaciones sindicales también se manifestaron. Luis Villavicencio, del Frente Unitario de Trabajadores (FUT) y de la Unión General de Trabajadores (UGT), indicó que el 1 de agosto se convirtió en una fecha histórica para los trabajadores del país.
Según el dirigente, las enmiendas aprobadas en 2015 vulneraron la libertad sindical y la contratación colectiva, por lo que con su derogatoria se ratificó la vigencia de los derechos laborales.
El presidente del Frente Unitario de Trabajadores (FUT) de Azuay, Édison Déleg, indicó que pese a la decisión iniciarán acciones legales contra quienes aprobaron en 2015 las enmiendas y que harán movilizaciones. El Grupo Parlamentario de Defensa de los Derechos de los Trabajadores anunció que independientemente del pronunciamiento de la Corte continúan en la elaboración de un proyecto de enmiendas a los artículos 229 y 326.